El párroco de la Iglesia Católica de Candelaria Lempira, Amílcar Lara, es hostigado y perseguido por defender a los pobres y estar contra el golpe que derrocó al presidente Manuel Zelaya, denunció hoy otro sacerdote.
Fausto Milla, miembro de la Comisión Verdad de la Plataforma de Derechos Humanos de Honduras, reveló que el pasado día 23 irrumpió en la parroquia de Candelaria y la casa cural un grupo de sujetos para intimidar al párroco.
Señaló que ese fue el único propósito, pues los invasores no robaron nada, excepto una imagen antigua, pero en cambio escribieron en las paredes frases como "cura guerrillero" y esvásticas y otros símbolos del nazi-fascismo.
El padre Milla dijo que el párroco Amílcar Lara se ha distinguido por ser un sacerdote que ha denunciado el golpe de Estado de junio de 2009 y las fraudulentas elecciones de las que surgió el actual Gobierno de Porfirio Lobo.
Su parroquia pertenece a la Diócesis del Occidente de Honduras, que se ha manifestado abiertamente contra el golpe militar.
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