La Casa de las Carnicerías abre hoy una sorprendente muestra sobre caligrafía árabe
Arriba, león de origen africano. Debajo, caballero cuyas letras forman una alabanza a Dios.dl
Las letras del alfabeto árabe, unidas o separadas, estilizadas o encabalgadas con talento, pueden llegar a formar un león, un halcón, una garza o un barco con todos sus remeros. Es el asombroso arte de la caligrafía islámica, poco conocido en occidente y que a partir de esta tarde protagoniza una nueva exposición en la Casa de las Carnicerías de Caja España-Duero, en la plaza de San Martín. Su comisaria, Margarita Torres-Sevilla, profesora de Historia Medieval, novelista, columnista del Diario y cronista oficial de León, será la encargada de abrirla al público a las 19.00 horas.
«El motivo es que en este 2011 se cumplen los 1.300 años de la invasión árabe de la Península Ibérica: podríamos enredarnos en hablar de batallas, confrontaciones, tomas de ciudades, califas, reyes... pero en este caso hemos preferido hacer hincapié en lo que nos une en vez de en lo que nos separa; esto es, la cultura -explica Torres-Sevilla-. Gracias a la cultura el hombre de una civilización concreta puede mirar, de corazón a corazón, al hombre encuadrado en otra». De hecho, para la sociedad islámica, la caligrafía es «el arte por excelencia», recuerda la cronista oficial de la ciudad, ya que «permite a los musulmanes vehicular el libro sagrado del Corán, lo que le confiere un carácter semisagrado. Era una forma de acercar la literatura, el arte y la religión a quienes no tenían acceso a costosos libros o a lujosas artesanías, es decir, al pueblo», añade.
La exposición reúne obras originales que abarcan un extenso lapso temporal, desde la Edad Media a los siglos XIX y XX, en pergamino, madera y piezas de metal, vidrio o cerámica, procedentes tanto del Al-Andalus peninsular como de territorios africanos y asiáticos. «Es espectacular un león, de origen africano, y un jinete con su caballo y armas, de época contemporánea. ¿Y qué significan las letras? Pues el león es una jaculatoria a Alá y también lo es el caballero: un enaltecimiento de Dios y una oda al valor», explica Torres-Sevilla, quien también destaca el valor de un mandala -conjunto de símbolos para la meditación- sufí. Además, la muestra incluye poemas épicos persas, escritos en farsi e ilustrados con gran minuciosidad, empleando metales preciosos como el oro y la plata, «ante los que palidecerían nuestros beatos medievales», indica la profesora de la Universidad de León. Arquetas, tinteros y hasta una espada del siglo XIII completan este recorrido por una cultura, la que iba desde Al-Andalus a Egipto y Oriente Medio, «que ofreció a la historia del arte y del pensamiento filósofos, matemáticos, poetas y artesanos de excepción, de enorme influencia en los reinos cristianos españoles, también en el de León, por supuesto», señaló Torres-Sevilla, quien también quiso recalcar el hecho de que el arte de la caligrafía no sabía de machismos, pues hubo también «excelentes calígrafas», como Layla, que fue compañera de Mahoma, todos ellos personas «muy cultas» que conocían «a la perfección el libro sagrado», según dijo. Entre los calígrafos andalusíes más célebres está el valenciano Ibn Gattus, coetáneo de Alfonso IX de León, a quien se atribuyen 1.000 copias del Corán.
Por otra parte, las figuras no entran en contradicción con la máxima islámica de la no representación figurativa, a decir de la comisaria. «En realidad no dejan de ser conjuntos de palabras y frases, quien los identifica con figuras concretas es el ojo y la mente del lector», comenta.
La muestra podrá verse hasta el 27 de febrero en León; después, del 3 al 27 de marzo, se expondrá en el centro cultural de la calle Río Selmo, en Ponferrada (laborables de 19.00 a 21.00, festivos de 12.00 a 14.00).
@E. Gancedo, (León)/Diario de León.es