Interior de una de las bodegas. Fran Jiménez
En la antigüedad eran usadas para la creación y conservación de caldos y vinos de manera sostenible. En la actualidad se aprovechan como merenderos familiares bajo tierra, peñas, locales de venta de productos tradicionales o restaurantes típicos que muestran la arquitectura popular de Castilla y León.
Las bodegas subterráneas, que conforman una red de galerías que comunican todo el centro histórico del municipio de Nava del Rey se han convertido en el próximo proyecto del consistorio local, que pretende poner en valor estos pequeños poblados furtivos «como un recurso turístico-cultural de gran escala a ejecutar un largo plazo de tiempo» como aseguró el alcalde de Nava del Rey, Cirilo Moro García, quien ha decidido incluir en el Plan General de Ordenación Urbana (P.G.O.U) las más de 421 cavidades para catalogarlas y darlas salida al exterior.
«Es imposible saber a ciencia cierta el número de kilómetros que tienen ya que algunas se encuentran en malas condiciones pero lo que es seguro es que la localidad está completamente hueca» aseguró Moro García quien explicó cómo en estos momentos el arquitecto municipal y parte del personal de Ayuntamiento están inventariando cada una de las bodegas de la localidad con el único objetivo de poner en valor como recurso turístico-cultural buena parte de la amplia y deteriorada red de bodegas subterráneas de origen medieval que horada el subsuelo de la localidad.
Y es que si este proyecto fructifica, Nava del Rey podría convertirse en el primer municipio de Valladolid y de la región con un doble catastro de la propiedad. «Nuestro fin es crear una red subterránea cultural y turística que recorra todo el municipio, pero claro esto se hará con el paso del tiempo, ahora estamos en el principio y tendrán que pasar muchos años para ver concluido este proyecto», explicó Moro García, quien agregó que «algunas de ellas tienen hasta 20 y 30 metros de profundidad y crean un laberinto de galerías en las que antiguamente se colocaban las cubas de madera para los vinos ya que Nava era una gran productora de vino».
Una de las bodegas más grandes es la de la Inquisición. Esta cueva se comunica con la bodega de la Vera Cruz, situada bajo uno de los altares de la iglesia. «La mayoría de las bodegas son de titularidad privada. Algunas está adecuadas como merenderos», explicó el alcalde quien puntualizó que «todas ellas están exentas de impuestos municipales y como mucho pagan un mínimo a las arcas municipales».
Si se hiciera una radiografía del subsuelo de Nava del Rey se podría apreciar cómo calles enteras están huecas y como las manzanas se comunican unas con otras por estas galerías. «Algunos vecinos de la localidad las tienen habilitadas y las usan cuando viene la familia o para hacer reuniones de amigos» comenta el regidor, mientras que señala cómo en el municipio había un restaurante que era una bodega que llamaba mucho la atención a todos los turistas que pasaban y paraban a comer o cenar en él.
Hoy algunos propietarios han decido aprovechar sus bodegas creando tiendas de vinos y de productos tradicionales.
@PATRICIA GONZÁLEZ/nortecastilla.es