Dirk Adriaensens - Tribunal BRussells
Traducido del inglés por Beatriz Morales Bastos
Primera parte: “Éxito”, un balance devastador
Inmediatamente después de la invasión de 2003, el veredicto triunfalista de los medios de comunicación dominantes fue que la guerra se había ganado; a Iraq se le garantizó un futuro bueno y democrático. William Rees-Mogg, escritor de The Times, loaba la victoria: “El 9 de abril de 2003 fue el Día de la Libertad para Iraq. (…) Lo logró ‘la locomotora de liberación global’, Estados Unidos. Tras 24 años de opresión, tres guerras y tres semanas de bombardeos constantes, Bagdad ha emergido de una era de las tinieblas. Ayer fue un día histórico de liberación” [1].
“Creo que para muchos estadounidenses el problema de esta guerra es que la premisa sobre la que justificamos el ir a la guerra demostró no ser válida, esto es, que Sadam tenía armas de destrucción masiva”, declaró a los periodistas Robert Gates, secretario de Defensa, en una visita a Iraq. “Así que, cuando se empieza desde este punto de vista, entender retrospectivamente cómo tratar la guerra (aunque el resultado sea bueno desde el punto de vista de Estados Unidos) siempre estará empañado por cómo empezó” [2].
Por consiguiente, Robert Gates reconoce que esta guerra era ilegal según el derecho internacional porque no hubo “casus belli”. Pero en la misma frase afirma que el resultado ha sido bueno para Estados Unidos. ¿Qué quiere decir exactamente? ¿Cómo puede ser un buen resultado para Estados Unidos todos los asesinatos y toda la destrucción? ¿Y qué pasa con las responsabilidades? Si Iraq está todavía pagando indemnizaciones por la invasión de Kuwait en 1990, ¿qué pasa con el pago de indemnizaciones por parte de Estados Unidos por toda la destrucción que ha causado en Iraq?
“Hemos combatido juntos, hemos reído juntos y a veces llorado juntos. Estuvimos hombro con hombro y juntos derramamos sangre”, dijo el general Ray Odierno a los jefes del ejército iraquí y a cientos de soldados y oficiales estadounidenses durante la ceremonia que oficialmente daba por terminadas las operaciones de combate. “Fue por los ideales compartidos de libertad y justicia” [3]. Sí, se rieron juntos, como en el tristemente famoso vídeo publicado por Wikileaks “Collateral Murder” [Asesinato colateral], del ataque contra civiles bagdadíes en julio de 2007, desde un helicóptero de combate que causó la muerte a más de una docena de iraquíes, dos de ellos periodistas de Reuters. Y ¡con toda seguridad, juntos han derramado sangre! Una gran cantidad de sangre de más de un millón de madres, padres, niños y ancianos del pueblo iraquí. ¿Todo eso por “los ideales compartidos de libertad y justicia”, Sr. Odierno? Pues bien, la mayoría de los iraquíes no comparten ese punto de vista. Para ellos, el país se ha sumido en la era de las tinieblas.
Los hechos
Estos son los hechos: el índice de mortalidad infantil ha aumentado un 150 por ciento desde 1990, cuando Naciones Unidas impuso las sanciones por primera vez. En 2008, sólo el 50 por ciento de los niños de primaria asistían a clase, un descenso respecto al 80 por ciento de los que asistían en 2005, y se sabía que [de este 30 por ciento] aproximadamente 1.500 estaban presos en centros de detención. Según estadísticas oficiales del gobierno, en 2007 había cinco millones de huérfanos iraquíes. Más de dos millones de iraquíes son refugiados y casi tres millones desplazados internos. El 70 por ciento de los iraquíes no tiene agua potable. Oficialmente, la tasa de desempleo llega al 50 por ciento y al 70 por ciento según datos extra oficiales. El 43 por ciento de los iraquíes vive en una pobreza abyecta. Ocho millones carecen de alimentos y tienen una necesidad extrema de ayuda humanitaria. El 80 por ciento de los iraquíes no disfruta de condiciones higiénicas. En un reciente estudio elaborado por Oxfam, el 33 por ciento de las mujeres no había recibido ayuda humanitaria desde 2003, el 76 por ciento de las viudas no recibía pensión; el 52 por ciento estaba en el paro, el 55 por ciento estaba desplazada desde 2003 y el 55 por ciento había sufrido violencia (de estas el 25,4 por ciento había sufrido violencia callejera gratuita, el 22 por ciento violencia de género, el 14 por ciento a violencia infligida por las milicias, el 10 por ciento a abusos o secuestro, el 9 por ciento a abusos sexuales y el 8 por ciento violencia infligida por las fuerzas multinacionales [4]). Iraq tiene un parlamento que no funciona, proliferan las enfermedades comunes, hay epidemia de enfermedades mentales y los suburbios urbanos crecen de forma descontrolada. El asesinato de personas inocentes se ha convertido en parte de la vida diaria.
William Blum ofrece una corta pero devastadora perspectiva general del “buen resultado” de esta guerra: “No se debería permitir que ningún estadounidense olvidara que la nación de Iraq, la sociedad iraquí, ha sido destruida, arruinada, [convertida en] un Estado fallido. Desde 1991, los estadounidenses bombardearon durante doce años con una excusa u otra; después invadieron, luego ocuparon, derrocaron al gobierno, asesinaron gratuitamente, torturaron ... El pueblo de esa desventurada tierra lo ha perdido todo: los hogares, las escuelas, la electricidad, el agua potable, el medio ambiente, los barrios, las mezquitas, su arqueología, sus empleos, sus carreras, a los profesionales, las empresas estatales, la salud física, la salud mental, la sanidad pública, el estado de bienestar, los derechos de las mujeres, su tolerancia religiosa, la seguridad; ha perdido a sus hijos, a sus padres, su pasado, su presente, su futuro, sus vidas ... Más de la mitad de la población o bien ha muerto o está herida, traumatizada, en la cárcel, desplazada en el interior o exiliada en el extranjero ... El aire, la tierra, el agua, la sangre y los genes están contaminados con uranio empobrecido ... padecen los más espantosos defectos de nacimiento ... en el suelo yacen bombas racimo sin explotar, a la espera de que las recojan los niños” [5].
Hannah Gurman añade a este nefasto cuadro del “éxito” : “Por mucho que el gobierno estadounidense borre el pasado o prediga el futuro de Iraq, los iraquíes de a pie seguirán enfrentándose a las caóticas y complicadas situaciones actuales. Desafío a Obama o a cualquiera que forme parte de la maquinaria de poder a que vaya a Iraq y mire a un niño a los ojos. A un niño que tras siete años de invasión estadounidense sigue sin tener una vivienda adecuada, agua potable, condiciones higiénicas, electricidad o educación. Digan entonces a este niño que la guerra en Iraq fue un éxito” [6] o lean esta valoración de la “historia del éxito iraquí” del iraquí Dr. Riad El Taher: “Hasta la fecha, los logros netos de la aventura de Bush/Blair son: entregar al pueblo iraquí un futuro en manos de matones y de especuladores económicos. Ninguno de ellos tiene el menor interés en servir al pueblo iraquí. La prueba es la rápida riqueza lograda por Chalabi, Alawi, Maliki, Sistani, Hakin, Bayati, Bachachi, Baher Alom y Rubai en virtud de su aventura política. Los recursos naturales de Iraq se han hipotecado para los próximos cincuenta años a los contratistas petroleros internacionales. Se obliga a emigrar de Iraq a los intelectuales y a los talentos con experiencia. La constitución está desarrollando y fomentando la división sectaria. Se debilita a las minorías (cristianos/sabeos [7]) o se las obliga a emigrar. Se violan los derechos humanos, en especial los de las mujeres, y se han revocado sus logros pasados de proteger los derechos de maternidad, el empleo y la sanidad. No se aborda seriamente la educación, la salud, el medio ambiente ni los recursos acuíferos, y lo mismo ocurre con la agricultura, la industria y la cultura. Gracias a Bush/Blair, Iraq celebró varias elecciones democráticas en las que los votos se compraron por favores, intimidación o miedo. Actualmente, los ciudadanos iraquíes tienen acceso a teléfonos móviles, múltiples canales de televisión que son propiedad de los matones iraquíes de la Zona Verde y sus patrocinadores son los inversores estadounidenses / británicos /kuwaitíess”.
La destrucción de Iraq ha generado dos millones de refugiados, pero no son bienvenidos en Europa. El pasado viernes, inmediatamente después de que 61 personas fueran devueltas en avión a Bagdad [8], la Agencia para los Refugiados de la ONU (UNHCR, en sus siglas en inglés) expresó su preocupación y su oposición a los continuos retornos forzados de ciudadanos iraquíes desde países europeos occidentales.
“La contradicción fundamental de este éxito es que las cien órdenes dictadas por Bremer convirtieron a Iraq en un gigantesco paraíso del libre mercado, pero en una espantosa pesadilla para los iraquíes. Colonizaron el país para el capital: saqueo a la mayor de las escalas, un laboratorio del capitalismo salvaje, armas de destrucción masiva. No se dio a los iraquíes ningún papel en la planificación ni se les concedieron subcontratos para compartir los beneficios. Las nuevas leyes económicas instituyeron impuestos bajos, el 100 por ciento de la propiedad de los activos iraquíes para los inversores extranjeros, el derecho a expropiar todos los beneficios, importaciones sin restricciones y contratos y usufructos a largo plazo durante 30-40 años, con lo que se despoja a los iraquíes de sus propios recursos de manera que ningún gobierno futuro lo pueda cambiar”, escribe Stephen Lendman [9].
Un informe de Transparencia Internacional afirma que la corrupción en Iraq se convertirá probablemente en "el mayor escándalo de corrupción de la historia" [10]. Y mientras Estados Unidos se retira de Iraq, deja tras de sí cientos de proyectos abandonados o incompletos. Se han despilfarrado más de 5.000 millones de dólares de los impuestos de los estadounidenses, más del 10 por ciento de los aproximadamente 50.000 millones de dólares que Estados Unidos ha gastado en la reconstrucción de Iraq, según autorías de un organismo de control estadounidense.
Basándose en un análisis de más de 300 informes de auditores, realizados para el inspector general especial para la reconstrucción de Iraq [11], es probable que esta cantidad se haya calculado a la baja. A pesar de los 53.000 millones de dólares en “ayuda” gastados desde la invasión de 2003, el 70 por ciento de los iraquíes carece de agua potable o electricidad. Estos fondos han forrado los bolsillos de los contratistas militares extranjeros y de altos cargos corruptos [12]. El inspector general especial para la reconstrucción de Iraq afirmó que el Departamento de Defensa estadounidense es incapaz de justificar convenientemente 8.700 millones de dólares. De 9.000 millones de dólares, el 96 por ciento está sin justificar. Es interesante indicar que mucho de este dinero no es dinero de “ayuda”, sino que procede de la venta del petróleo y del gas iraquí, y también de la venta de algunos de los activos congelados de la era de Sadam Husein [13].
Según informa la televisión iraquí Al-Iraqiya TV, citando a un portavoz de seguridad de Bagdad, las autoridades iraquíes han iniciado la construcción de un muro de seguridad en torno a la capital, Bagdad. El muro de hormigón con ocho controles militares se terminará para mediados de 2011 [14]. Así pues, no sólo se obliga a los habitantes de Bagdad a vivir en comunidades cerradas (por muros de “seguridad” de hormigón entre los diferentes distritos), sino que toda la ciudad estará encerrada, cerrada al mundo exterior como una fortaleza medieval.
El pasado mes de mayo un estudio llamado The Mercer Quality of Living [15] publicó sus conclusiones sobre la “ciudad más habitable” en 2010. Bagdad estaba clasificada en último lugar, la ciudad menos habitable del planeta. Esto se debe a la completa destrucción, llevada a cabo por el ejército estadounidense, de las plantas de tratamiento de aguas residuales, de las fábricas, de las escuelas, de los museos y de las centrales eléctricas de Iraq [16]. UN-HABITAT, una agencia de la ONU, publicó recientemente un informe de 218 páginas titulado State of the World’s Cities, 2010-2011 [Estado de las ciudades del mundo 2010-2011] [17]. El comentario de Adil E. Shamoo: “Casi intencionalmente oculto entre estas estadísticas hay un hecho chocante acerca de las poblaciones urbanas iraquíes. En las últimas décadas, antes de la invasión estadounidense de Iraq en 2003, el porcentaje de población urbana que vivía en barriadas a las afueras de las ciudades era inferior al 20 por ciento. Hoy el porcentaje ha ascendido al 53 por ciento: 11 millones de una población total de 19 millones de habitantes urbanos. En la última década, la mayoría de los países han hecho progresos para reducir el número de habitantes en barriadas a las afueras de las ciudades, pero Iraq ha ido rápida y peligrosamente en la dirección contraria”[18].
El Índice de Paz Global (Global Peace Index, GPI) de 2007 clasifica anualmente los países según su carácter pacífico identificando elementos clave generadores de paz o de violencia. Iraq estaba clasificado el último de los 144 países de su informe de 2009 y Afganistán el penúltimo. En abril de 2010 Amnistía Internacional publicó un informe titulado “Iraq: Resumen de derechos humanos”. Sus conclusiones eran las siguientes: “La situación de los derechos humanos en el país sigue siendo muy grave. Todas las partes que intervienen en el continuo conflicto han cometido graves abusos y la población sigue siendo la más castigada por la violencia continua. La situación de seguridad continúa siendo precaria a pesar de algunas mejoras en 2009. Los ataques a civiles, las detenciones, los secuestros, los enfrentamientos armados…” ocurren a diario.
Todavía no hay gobierno en Iraq. “Algunos analistas cínicos han insinuado que la situación actual era exactamente lo que quería Estados Unidos (e Israel) o lo que Washington tenía en mente cuando redactó la Constitución. Las actuales divisiones iraquíes mantienen al país débil y a merced de Estados Unidos y permiten a éste seguir desempeñando su parte en la balanza de poder para perpetuar su presencia”, escribe Saad Jawad, profesor de ciencias políticas en la Universidad de Bagdad [19].
¿Quién amenaza la seguridad de Iraq? ¿Quién es responsable de los atentados mortales, de los coches bomba…? Hay muchos rumores que hablan de la implicación de las fuerzas de seguridad. El 28 de agosto pasado, las fuerzas de seguridad estadounidenses detuvieron a Ali Faisal al Lami, un diputado del partido de Ahmad Chalabi (que una vez fue el político iraquí favorito del gobierno Bush) y lo involucraron con atentados que habían matado a estadounidenses e iraquíes. Al Lami es un alto cargo musulmán chií y miembro del Partido Sadrista que tiene un alto cargo en el Comité de Justicia y Responsabilidades que preside Chalabi [20]. El significado de esta información es que los matones, que llegaron a Iraq con las tropas estadounidenses, y cuyas milicias fueron armadas, financiadas y adiestradas por Estados Unidos, son culpables, al menos parcialmente, de la cadena de atentados que asola el país.
Con estos hechos en mente, resulta increíble oír hablar a los altos cargos estadounidenses de un “buen resultado para Estados Unidos”. Obama declaró el llamado final de la Misión de Combate en Iraq [21]. Se niega a mirar atrás a los siete años de catástrofe, quiere mirar al futuro y huir de sus responsabilidades. Quizá el comentario más impactante del discurso de Obama es el de Chris Floyd:
“Tras declarar falazmente un ‘final de las misiones de combate en Iraq’ (…) Obama pronunció la que fue quizá la mentira más mayúscula y amargamente dolorosa de la noche: “Por medio de este notable capítulo en la historia de Estados Unidos e Iraq, hemos asumido nuestra responsabilidad”. ¡“Hemos asumido nuestra responsabilidad”!. No, señor presidente, no la hemos asumido. No hasta que muchos estadounidense de las más altas esferas se sienten en el banquillo por comisión de crímenes de guerra; no hasta que Estados Unidos pague cientos de miles de millones de dólares en indemnizaciones al pueblo iraquí por la expoliación de su país y el asesinato masivo de su pueblo; no hasta que Estados Unidos abra sus fronteras para aceptar a todos aquellos que han sido y serán expulsados de Iraq por la ruina salvaje que les hemos infligido o huyendo de los despiadados matones y sectarios que hemos soltado (y a los que hemos dado poder) en el país; no hasta que usted, señor presidente, se ponga de rodillas, se dé golpes en el pecho y proclame un Día Nacional de la Vergüenza que se caracterice cada año por lamentaciones, reparaciones y confesiones de culpa por nuestro crimen de sangre contra la humanidad en Iraq” [22].
Pero Estados Unidos no tiene intención de pagar reparaciones por el daño causado, sino todo lo contrario: Christopher Crowley, director de USAID en Iraq, afirmó que parte de la tendencia general de todos los programas de asistencia en Iraq era presionar a los iraquíes para que asumieran el programa estadounidense de ayuda a las víctimas. Estados Unidos está “buscando una mayor contribución por parte del gobierno (iraquí) en estos programas para que se vuelvan más sostenibles a medida que pase el tiempo”, afirmó. Crowley indicó que muchas personas en Estados Unidos creen que Iraq tiene medios para pagar su propia reconstrucción tras la guerra al tener las terceras mayores reservas demostradas de petróleo crudo del mundo. Cuando se le preguntó por qué el gobierno iraquí debería pagar compensaciones por las muertes ocurridas durante operaciones estadounidenses, afirmó que las víctimas “son ciudadanos iraquíes” [23]. Esto es verdaderamente increíble: Estados Unidos quiere que el gobierno iraquí pague compensaciones por la destrucción y por todos los asesinatos que la máquina militar estadounidense infligió al país. Las razones dadas son: a) Iraq puede vender gran cantidad de petróleo para reconstruir el país, y b) las víctimas son iraquíes y, por consiguiente, las compensaciones las deben pagar... los iraquíes. Esto sí es una lógica retorcida. Comentario de un iraquí: “Alguien entra en mi casa ilegalmente, destruye todo y mata a mi familia, ¿y me pide que yo pague los daños? ¿Estoy hablando con bárbaros recién salidos de una cueva?”.
Toda esta destrucción ha costado a los contribuyentes estadounidenses gran cantidad de dinero. “Mientras Estados Unidos acaba el combate en Iraq, resulta que nuestro presupuesto de aproximadamente tres billones de dólares (que dan cuenta de los gastos de ambos gobierno y del más amplio impacto de la guerra en la economía estadounidense) fue, en todo caso, demasiado bajo. Por ejemplo, el coste de diagnosticar, tratar y compensar a los veteranos inválidos ha demostrado ser más alto del esperado”, escribe Joseph Stiglitz en The Washington Post [24]. Además, un informe publicado en India por Strategic Foresight Group en un libro titulado The Cost of Conflict in the Middle East [El coste del conflicto en Oriente Próximo] calcula que el conflicto en la zona a lo largo de los últimos 20 años ha costado a las naciones y pueblos de la región 12 billones de dólares. El informe indio añade que Oriente Próximo ha registrado “el récord más alto de gastos militares en los últimos 20 años y se considera la región más armada del mundo” [25]. Imaginen ustedes si esta cantidad se hubiera gastado en infraestructura rural y urbana, en diques y embalses, en desalinización e irrigación, en forestación e industrias pesqueras, en industria y agricultura, en medicina y salud pública, en vivienda y tecnología de la información, en empleos, en la integración equitativa de ciudades y pueblos, y en reparar los estragos de las guerras en vez de en armas que sólo pueden crear destrucción.
La insoportable levedad de los servicios públicos iraquíes
Como se ha mencionado antes, necesidades básicas como el agua potable, una electricidad que no falle, la recogida de basuras, un sistema de alcantarillado funcional, trabajo, atención sanitaria, etc., están fuera del alcance de las posibilidades de la vasta mayoría de los iraquíes. Iraq se ha deslizado hacia la era de las tinieblas, no sólo en sentido figurado, sino también en el muy literal puesto que la luz se ha convertido en un bien escaso. Han ido aumentando las protestas ya que la electricidad pública sólo dura unas pocas horas al día. La policía iraquí utilizó cañones de agua y porras para dispersar a los manifestantes de la ciudad de Nassiriya, al sur de Iraq, después de que estallaran las protestas el 22 de agosto a causa de los agobiantes apagones y de los servicios inadecuados. En junio hubo protestas similares en la misma ciudad cuando mil manifestantes trataron de tomar al asalto el edificio del Consejo Provincial y se enfrentaron con la policía, y también en Basora, donde murieron dos personas a causa de los enfrentamientos con la policía [26].
Las violentas protestas en otras ciudades debido a los apagones obligaron a dimitir al ministro de Electricidad de Iraq, Kareem Waheed [27], quien fue sustituido por Hussain al-Shahristani, ministro del Petroleo de Iraq, que llegó al país en 2003 detrás de los tanques estadounidenses y británicos. Este emitió un decreto: “Se prohíbe toda actividad sindical y se cesa toda forma de cooperación y discusión oficial con los sindicatos del sector eléctrico; se ordena a la dirección que ayude a la policía a hacer cumplir el cierre de las sedes de los sindicatos y a confiscar documentos, muebles, ordenadores y todo lo que haya en las sedes”.
Akram Nadir, representante internacional de la Federación de Consejos de Trabajadores y Sindicatos de Iraq, FWCUI (en sus siglas en inglés) ha urgido a escribir cartas de protesta a Al-Shahristani: “Esta orden es una clara violación de los principios laborales internacionales que nuestro gobierno está obligado a respetar y le pedimos que dé marcha atrás y detenga este ataque a los sindicatos iraquíes” [28*]
Tras la campaña de bombardeos “Tormenta del desierto” de 1991 se destruyeron un 91 por ciento de las centrales y de los cables eléctricos: 95 centrales eléctricas y todos los cables de 400.000 y 135.000 voltios. El suministro de petróleo se detuvo completamente: se eliminaron los campos petrolíferos de Kirkuk en el norte y de Rumaya en el sur, las refinerías, las estaciones de bombeo, las terminales de petróleo para la exportación en Um Qasr y Fao. Los iraquíes fueron capaces de restaurar la electricidad en seis meses a pesar de las graves sanciones que se habían impuesto al país. La campaña de reconstrucción tras el final de las hostilidades en marzo de 1991 fue un logro de dimensiones asombrosas. Ahora, tras siete años de “liberación”, los servicios públicos básicos siguen sin funcionar adecuadamente.
Un blogger escribió: “Durante el reinado del anterior ministro solíamos tener dos horas de electricidad y dos horas no. Esto significa que teníamos electricidad ocho horas al día. Ahora y en los días de Shahristani tenemos menos de cuatro horas de electricidad durante el demencial verano de Iraq en el que las temperaturas superan los 50 grados durante más de tres meses. Al gran ministro se le ocurrió la razón del problema y una solución muy simple para resolver el dilema de la electricidad. Cree que nosotros (el pueblo iraquí) desperdiciamos la electricidad y que todas las familias de una casa deberían juntarse en una habitación por la noche y dormir. No sé cómo puede siguiera decir o pensar esta vergonzosa solución” [29].
Shahristani no se tiene que preocupar por el calor del verano. Echen una mirada a algunos de los salarios de sus excelencias iraquíes: el presidente iraquí, unos 700.000 dólares al año; el vice-presidente iraquí, 600.000 dólares al año. Las agencias de noticias iraquíes afirman que el vice-presidente Adel Abdul Mahdi recibe en total un millón de dólares al mes. El salario de Maliki es igual al de presidente iraquí. El presidente del consejo judicial: unos 100.000 dólares al mes (no está claro respeto a las asignaciones). La pensión de todos ellos es el 80 por ciento del último salario durante el resto de sus vidas [30].
¿Libertad? ¿Justicia?
Segunda parte: la interminable ocupación y sus efectos insidiosos ¿Retirada?
Incuso cuando el presidente Barack Obama anunciaba el final del combate en Iraq, las fuerzas estadounidenses continuaban luchando en el llamado final de la misión de combate de Iraq. A primera hora del miércoles, soldados estadounidenses acordonaban un pueblo al norte mientras sus socios iraquíes hacían redadas por las casas y detenían a decenas de personas sospechosas de ser resistentes [31].
“Junto con la Gran Muralla de China”, afirmó el embajador Hill, “la embajada estadounidense de Bagdad es una de esas cosas que se pueden ver a simple vista desde el espacio; quiero decir que es descomunal” [32]. Lo es. Con algo más de 42 hectáreas, es la mayor embajada estadounidense del mundo. Además de seis edificios de pisos, tiene una piscina de lujo así como una planta de tratamiento y depuración de aguas. (…) El Departamento de Estado ha solicitado un mini-ejército para proteger su Fortaleza América, lo que incluye 24 helicópteros Black Hawk y 50 vehículos blindados [33].
Después de la retirada de este mes todavía permanecerán 50.000 soldados estadounidense en 94 bases militares “asesorando” y adiestrando al ejército iraquí, “proporcionando seguridad” y llevando a cabo misiones “en contra del terrorismo”. Según el general de división Joseph Reynes, director del Elemento de Coordinación del Componente Aéreo de las Fuerzas Estadounidenses-Iraq, unos 5.800 de estos soldados pertenecen a las fuerzas aéreas [34].
Mientras tanto, el gobierno estadounidense no sólo está dando un nuevo nombre a la ocupación sino que está privatizándola. Hay unos 100.000 contratistas privados trabajando para las fuerzas de ocupación, de los cuales más de 11.000 son mercenarios armados, la mayoría de ellos “ciudadanos de terceros países”, generalmente de países en desarrollo. Hace sólo quince días un contratista de seguridad peruano y dos ugandeses murieron en un ataque con misiles a la Zona Verde [35].
Puede que el Pentágono esté reduciendo sus fuerzas de combate en Iraq, pero el ejército planea intensificar sus esfuerzos para influenciar en la cobertura de los medios de comunicación tanto en este país, como en Estados Unidos. “Es esencial para el éxito del nuevo gobierno y de la misión Fuerzas Estadounidenses-Iraq que ambos se comuniquen eficazmente con nuestras audiencias estratégicas (esto es, audiencias iraquíes, panárabes, internacionales, estadounidenses y Fuerzas Estadounidenses-Iraq) para obtener una aceptación generalizada de los temas y mensajes centrales”, según un anuncio de pre-selección de un equipo de 12 contratistas civiles para proporcionar “servicios de gestión de comunicación estratégica” allí [36].
El hecho claro y simple es que la guerra y la ocupación continuarán hasta que el pueblo de Iraq y el mundo obliguen a Estados Unidos a una retirada total. El pueblo estadounidense tiene una responsabilidad especial en la construcción de un movimiento poderoso de decidida oposición política a la actual ocupación de Iraq y a la guerra contra este país emprendida por el gobierno estadounidense. No se engañen creyendo que Obama o cualquier gobierno presidencial abandonará Iraq por su propia voluntad, concluye Kenneth J. Theisen del grupo estadounidense en contra de la guerra “World Can’t Wait”. El grupo National Popular Resistance ha intensificado recientemente sus actividades contra la guerra. También ha habido un importante aumento de ataques con cohetes y mortero en la fortificada Zona Verde y en el aeropuerto de Bagdad, según el general de brigada Ralph O. Baker, vice-comandante de las fuerzas estadounidenses en el centro de Iraq. El general Baker afirmó que en los últimos dos meses se habían producido unos 60 de estos ataques frente a los “dos o tres” de los meses anteriores [37].
La infame contabilidad a la baja de las víctimas civiles
Mientras que la elite dirigente de Washington considera la destrucción de Iraq “un buen resultado para Estados Unidos”, la mayoría de los periodistas de la prensa dominante siguen concretando el número de víctimas civiles en unas 100.000. Otra mentira, una flagrante infravaloración y un insulto para el sufrimiento del pueblo iraquí. La cifra proviene de Iraq Bodycount, una organización de hace un trabajo valioso recopilando datos de los muertos de los que se informa en la prensa dominante [38], pero sus cifras no pueden servir como norma científica para establecer un cálculo relevante de las víctimas iraquíes.
Veamos unos pocos ejemplos: veinte mil [39] de los 34.000 médicos registrados de Iraq abandonaron el país tras la invasión estadounidense. Para abril de 2009 habían retornado menos de 2.000, la misma cantidad que los que fueron asesinados en el curso de la guerra [40]. Iraq Bodycount tienen unos 70 médicos en su base de datos de víctimas [41], lo que significa que sólo han contabilizado el 3,5 por ciento de la cantidad que se calcula de médicos asesinados.
Iraq Bodycount contabiliza 108 académicos en su base de datos. El Tribunal BRussells tienen una lista parcial de 448 académicos asesinados [42] recopilada a través de diferentes fuentes. Aunque esta lista es muy incompleta, la lista de Iraq Bodycount sólo contabiliza el 24 por ciento de las víctimas entre los académicos contabilizadas por el Tribunal BRussells.
Quizá la categoría de víctimas mejor contabilizada sea la de los profesionales de los medios de comunicación. El Tribunal BRussells tiene una lista 352 profesionales de los medios de comunicación asesinados [43]. En septiembre de 2007, el director general de Al-Iraqiya, Habib al-Sadr, declaró a AFP que al menos 75 miembros de su personal habían sido asesinados desde que él empezó a dirigir el canal en 2005 y otros 68 habían resultado heridos [44]. En aquel momento, la lista del Tribunal BRussells de profesionales de los medios asesinados tenía en su base de datos menos de una tercera parte de esta cifra. Pero la cifra de Iraq Bodycount es de sólo 241 muertos.
El 20 de septiembre de 2007 Les Roberts, autor de los dos estudios de la revista médica The Lancet sobre la mortalidad en Iraq, se defendía contra las acusaciones de que sus estudios eran “profundamente defectuosos”: “Un estudio sobre trece países afectados por la guerra presentado en una reciente conferencia celebrada en Harvard concluyó que la prensa y los gobiernos no informan de más del 80 por ciento de las muertes violentas en conflictos. Middle East Online citaba recientemente a altos cargos de la ciudad iraquí de Najaf quienes afirmaban que desde el inicio del conflicto se habían enterrado en la ciudad 40.000 cuerpos no identificados. En una charla ofrecida a los miembros del Rotary Club, y de la que informó C-SPAN el 5 de septiembre, H.E. Samir Sumaidaye, embajador iraquí en Estados Unidos, afirmó que en Iraq había 500.000 de viudas recientes. Del mismo modo, la Comisión Baker-Hamilton concluyó que el Pentágono contaba a la baja los incidentes violentos dividiéndolos por diez. Por último, la respetada empresa de opinión británica ORB publicó los resultados de una encuesta en la que se calculaba que un 22 por ciento de los hogares iraquíes habían perdido a un miembro de la familia debido a la violencia durante la ocupación de Iraq, lo que equivale a 1.200.000 muertos. Esta conclusión confirma, en líneas generales, una encuesta menos precisa que la de la BBC del pasado mes de febrero en la que se informaba que el 17 por ciento de los iraquíes tenía un miembro de su familia que había sido víctima de la violencia. Actualmente Existen dos encuestas y tres informes científicos que sugieren todos ellos que los cálculos oficiales y los de los medios de comunicación en Iraq ignoran entre el 70 y el 95 por ciento de los muertos. Las pruebas indican que el alcance de la falta de información por parte de los medios no hace sino aumentar con el tiempo” [45].
Un memorandum del asesor jefe científico del Ministerio de Defensa [británico], Sir Roy Anderson, afirmaba que: “El plan del estudio (de The Lancet) es sólido y utiliza métodos que se consideran cercanos a “la mejor práctica” en este área dadas las dificultades de la recolección y verificación de datos en las actuales circunstancias en Iraq”. En un correo electrónico, publicado por el Foreign Office británico, en el que un alto cargo pregunta por el informe de The Lancet, el alto cargo escribe: “Con todo, no se puede despreciar la metodología del estudio, es una manera probada y comprobada de cuantificar la mortalidad en zonas de conflicto” [46].
Todavía no está cerrada la discusión sobre las víctimas mortales, pero podemos adelantar con seguridad la cifra de más de un millón de muertos causados por esta guerra, la mayoría de ellos por causas violentas. En la página web del Tribunal BRussells se puede consultar un archivo de artículos acerca de la acalorada discusión en la prensa y en blogs sobre el cálculo de muertos civiles durante la ocupación estadounidense:
http://www.brusselstribunal.org/Lancet111006.htm
Un oscuro verano para los académicos iraquíes
El Tribunal BRussells es bien conocido por la su campaña iniciada en 2005 para concienciar acerca de la situación de los académicos iraquíes. Regularmente recibe actualizaciones procedentes de diferentes fuentes de las ejecuciones sumarias de académicos iraquíes. Presentamos a continuación una breve perspectiva general de las víctimas que ha habido durante este verano:
Ehab Al-Ani, director de hospital en Al Qaim, murió el 5 de junio de 2010 a consecuencia de una bomba en la carretera. La investigación inicial señaló que el Dr. Al Ani no fue asesinado casualmente.
El 29 de junio, Ahmed Jumaa, vice-rector de la Universidad Islámica de Ramadi, murió a consecuencia de una bomba en la carretera en Hit. Ese mismo día el profesor Ali Sayegh Zidane, especialista en cáncer del hospital Harithiya de Bagdad, fue asesinado por un hombre armado.
El 14 de julio la policía iraquí encontró el cuerpo descompuesto del profesor universitario Adnan Al-Makki, que había sido apuñalado hasta morir en su casa de Bagdad. Ese mismo día un profesor universitario cuyo nombre se desconoce fue asesinado por un hombre armado en el oeste de Bagdad
A primeras horas de la mañana del día 11 de agosto varios hombres armados irrumpieron en casa de la Dra. Intisar Hasan Al Twaigry, directora del hospital obstétrico Illwiyah de Bagdad. Ataron a su marido, dispararon únicamente a la Dra. Al Twaigry y se fueron con 20.000 dólares.
Mohammed Ali El-Din, especialista en farmacia, fue asesinado la tarde del 14 de agosto en la zona de Al Numaniya. Le atacaron unos hombres armados que dispararon contra el profesor, el cual murió inmediatamente. El profesor había vuelto a Iraq unos meses antes tras pasar una temporada estudiando en la Universidad George Washington de Estados Unidos.
El dr Kamal Qasim Al Hiti, profesor de sociología, fue secuestrado en Bagdad el 14 de agosto de 2010, a las cuatro de la tarde. Unas semanas antes había recibido una carta con una bala en la que se le amenazaba para que se fuera. Su cuerpo torturado se encontró el día 22 de agosto a orillas del río Tigris, al otro lado de la Zona Verde, en el distrito de Karad (bajo control del Consejo Supremo Islámico - Brigada Badr). Tenía la cara parcialmente quemada, había sido torturado y colgado. Criticaba muy abiertamente la ocupación. Era director del periódico Al Mustaqila que había sido registrado y prohibido parcialmente por criticar la ocupación y sus milicias [47].
El 28 de agosto de 2010 el Tribunal BRussells recibió el siguiente correo electrónico: “Me gustaría añadir el nombre de mi buen amigo el Dr. Samer Saleem Abbas, que fue asesinado en su clínica privada de ecografías por un hombre armado con una pistola con silenciador que dijo a sus pacientes: “No hay necesidad de que esperen más en la clínica, su médico está muerto”. El Dr. Samer recibió cinco o seis tiros, uno en la boca... Murió con la pluma en la mano. Trabajaba como radiólogo y especialista, y era el jefe del departamento de radiología en un hospital quirúrgico especializado (HospitalAl-Jerahat) de la ciudad médica de Bagdad. Hemos dado su nombre a la sala de conferencias del departamento; solíamos conversar y soñar con reconstruir la radiología en Iraq después de la guerra. Por favor, espero que esta información sea suficiente para añadir su nombre”.
No se ve un final a los asesinatos selectivos de las mejores y más lúcidas mentes de Iraq. Se cree que desde mediados de 2006 aproximadamente el 40 por ciento de la clase media de Iraq ha huido del país. Desde entonces la situación no ha hecho sino empeorar, aunque a una velocidad menor. Siguen siendo muy necesarias las acciones para invertir esta fuga de cerebros. Sin embargo, la mayoría de los observadores no ve que el gobierno esté tomando medidas concretas para crear las condiciones necesarias para que la clase media formada retorne a Iraq y sin esta, Iraq no tiene un futuro viable.
Notas
1. Roy Greenslade, Press Gang: How Newspapers Make Profits From Propaganda, véase:
http://www.buzzle.com/editorials/4-10-2004-52754.asp
2.
http://www.mcclatchydc.com/2010/09/01/99997/gates-iraq-outcome-will-always.html#ixzz0yQLOLNxb
3-
http://www.mcclatchydc.com/2010/09/01/100006/as-us-combat-role-ends-in-iraq.html#ixzz0yQOJPQgw
4-
http://www.sfgate.com/cgi-bin/article.cgi?f=%2Fc%2Fa%2F2010%2F06%2F27%2FIN5D1E116Q.DTL#ixzz0yUDbF2Va
5-
http://killinghope.org/bblum6/aer85.html
6-
http://www.salon.com/news/iraq_war/index.html?story=%2Fnews%2Ffeature%2F2010%2F08%2F15%2Firaq_withdrawal_success
7.- El sabeísmo es una antigua religión de la Península Arábiga pre islámica surgida en la región de Saba (hoy Yemen). Actualmente sólo queda una minoría en Iraq. [N.de la T].
8-
http://www.unhcr.org/4c80ebd39.html
9-
http://sjlendman.blogspot.com/2010/04/iraq-today-afflicted-by-violence.html
10-
http://www.americanchronicle.com/articles/view/58532
11-
http://news.yahoo.com/s/ap/20100829/ap_on_bi_ge/ml_iraq_us_reconstruction_legacy
12
http://www.sfgate.com/cgi-bin/article.cgi?f=%2Fc%2Fa%2F2010%2F06%2F27%2FIN5D1E116Q.DTL#ixzz0yUFpWWKI
13-
http://www.bbc.co.uk/news/world-south-asia-10774002
14-
http://www.twocircles.net/2010may03/iraq_starts_construction_security_wall_around_baghdad.html
15-
http://www.mercer.com/qualityoflivingpr
16-
http://www.michaelmoore.com/words/mike-friends-blog/truth-about-end-combat-operations
17-
http://www.unhabitat.org/pmss/listItemDetails.aspx?publicationID=2917
18-
http://www.fpif.org/articles/what_you_will_not_hear_about_iraq
19-
http://www.bitterlemons-international.org/inside.php?id=1292
20-
http://www.mcclatchydc.com/2008/08/28/51031/chalabi-aide-arrested-on-suspicion.html
21-
http://www.nytimes.com/2010/09/01/world/01military.html?_r=1
22-
http://chris-floyd.com/articles/1-latest-news/2016-speech-defect-emissions-of-evil-from-the-oval-office.html
23-
http://abcnews.go.com/International/wireStory?id=11381847
24-
http://www.washingtonpost.com/wp-dyn/content/article/2010/09/03/AR2010090302200.html
25-
http://rickrozoff.wordpress.com/2010/09/03/middle-east-loses-trillions-as-u-s-strikes-record-arms-deals/
26-
http://alertnet.org/thenews/newsdesk/LDE67L04Z.htm
27-
http://www.bbc.co.uk/news/10371581
28-
http://www.ahewar.org/eng/show.art.asp?aid=1058
29-
http://blogs.mcclatchydc.com/iraq/2010/08/bring-us-back-the-old-fever-.html
30-
http://blogs.mcclatchydc.com/iraq/2010/06/iraqs-top-ten-salaries-and-the-best-pension-in-the-world-i-guess.html
31-
http://www.salon.com/news/feature/2010/09/01/ml_iraq_45/index.html
32-
http://www.npr.org/templates/story/story.php?storyId=129119290
33-
http://www.salon.com/news/iraq_war/index.html?story=%2Fnews%2Ffeature%2F2010%2F08%2F15%2Firaq_withdrawal_success
34-
http://www.airforcetimes.com/news/2010/08/MONDAYair-force-iraq-5800-airmen-remain-082310w/
35-
http://www.guardian.co.uk/commentisfree/cifamerica/2010/aug/04/us-iraq-rebranding-occupation
36-
http://www.washingtonpost.com/wp-dyn/content/article/2010/05/24/AR2010052403839.html
37-
http://www.nytimes.com/2010/09/02/world/middleeast/02iraq.html?_r=2
38-
http://www.iraqbodycount.org/
39-
http://www.brookings.edu/saban/iraq-index.aspx
40-
http://www.salon.com/news/iraq_war/index.html?story=%2Fnews%2Ffeature%2F2010%2F08%2F15%2Firaq_withdrawal_success
41-
http://www.iraqbodycount.org/database/individuals/
42-
http://www.brusselstribunal.org/academicsList.htm
43-
http://www.brusselstribunal.org/JournalistKilled.htm
44-
http://www.brusselstribunal.org/Journalists.htm
45-
http://www.globalresearch.ca/index.php?context=viewArticle&code=ROB20070922&articleId=6848 http://news.bbc.co.uk/2/hi/uk_news/politics/6495753.stm
46-
http://news.bbc.co.uk/2/hi/uk_news/politics/6495753.stm
47-
http://www.brusselstribunal.org/academicsList.htm
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