La orden de los jesuitas ha aceptado pagar alrededor de 166 millones de dólares (100 millones de euros) a las más de 500 víctimas que sufrieron abusos sexuales cuando eran niños en las escuelas católicas de cinco estados del noroeste de EE UU, según ha anunciado el abogado de las víctimas.
La mayoría de los afectados son menores indígenas que sufrieron abusos a manos de los sacerdotes pederastas en los Estados de Oregón, Washington, Alaska, Idaho y Montana. Los abusos se cometieron entre 1940 y 1990 en escuelas de poblaciones remotas o reservas, donde, según denunciaron, la orden enviaba a los sacerdotes que consideraban problemáticos. "Es un día de rendición de cuentas", dijo Clarita Vargas, miembro de la tribu Colvill, de 57 años, que sufrió abusos del jefe de La Misión y la Escuela Santa María junto a sus hermanas cuando tenía siete años.
El abogado de las víctimas dijo que se trata de la mayor indemnización realizada por una congregación católica. La Compañía de Jesús de la Provincia de Oregón, que abarca estos cinco Estados, se declaró en bancarrota en 2009 después de llegar a un acuerdo económico con otro centenar de víctimas. En esta ocasión, parte de los 100 millones de euros serán abonados por aseguradoras.
@EFE