Como es sabido, la talla de marfil llegó al Museo de León en 1874 después de que la Congregación de las monjas se vieran obligadas a venderla para hacer frente a la atención que un médico prestó a una de las religiosas. Así, cabe destacar que Ramón Álvarez de la Braña aseguraba que su procedencia era sin duda San Isidoro, mientras que Gómez Moreno escribió que había sido comprado por alguien cuyo nombre no especifica en la ciudad de León. Los expertos coinciden en señalar que la hipótesis más plausible es que estuviera en la Colegiata y con el tiempo se donara al monasterio, en algún momento de la Edad Media.
Pero ¿dónde se creó? ¿En qué taller se ideó y se modeló? El profesor emérito de la Universidad de Pittsburgh, John Williams, destaca en un artículo publicado en 1993 y titulado El arte medieval español. 500-1200. que si lo comparamos con el Cristo de marfil de Fernando y Sancha que se conserva en el Arqueológico Nacional, el de Carrizo ha avanzado hacia un estilo más románico. Así, el profesor destaca que no sólo la cabeza, sino también los miembros están concebidos sin la estricta consideración por las proporciones normales, y precisa que la combinación de las rodillas con el ángulo que adoptan los pies, y la cabeza, empujada hacia delante para imprimir una energía dinámica, están ausentes en el crucifijo de 1063. «Desde el punto de vista estilístico, el Cristo de Carrizo está más cerca de los marfiles de de la época de Fernando, lo que indica que podría pertenecer a un periodo posterior», subraya Williams, que añade además que no hay marfiles en el tesoro de San Isidoro de un estilo comparable.
El experto recuerda que el crucifijo de Carrizo llegó al museo de León en 1874 procedente del monasterio cisterciense. «Sin embargo, este convento se fundó en 1176, con lo que la procedencia de nuestra figura es una cuestión abierta», dice.
John Williams recuerda que a Urraca, la hija de Fernando I y Sancha, se la relaciona con numerosas cruces ahora perdidas, pero ninguna es descrita como de marfil, con lo que resulta imposible hacer una conexión certera entre Urraca y el Cristo de Carrizo, incluso cuando su estilo sugiere que pertenece a este periodo. En este sentido, recuerda que Estella Marcos propone que la cruz de oro donada a la Catedral de León en el año 1073 podría ser la del Cristo de Carrizo.
@Cristina Fanjul/Diario de León.es