Más de 280 documentos reales plasmados en un libro revelan una relación "única" entre las prioras y monjas del monasterio toledano de Santo Domingo el Real y la Corona de Castilla en el ocaso de la Edad Media, según un experto medievalista.
Francisco de Paula Cañas Gálvez, doctor en Historia Medieval por la Universidad Complutense de Madrid, ha estudiado la documentación real que guarda el archivo del monasterio dominico de clausura, que evidencia que no solo fue un "centro religioso importantísimo" en la Baja Edad Media, sino también un importante "centro político".
Cañas, en una entrevista con Efe, explica que el intercambio epistolar entre las monjas y la realeza contiene expresiones de afecto poco usuales en la correspondencia real de la época y denotan una "muy estrecha relación".
Esto es así, en parte, a que la priora Teresa de Ayala, amante de Pedro I de Castilla, alias "El Cruel", y sus descendientes, como su hija bastarda, María de Castilla, supieron "granjearse el favor de los reyes de Castilla hasta tiempos de los Reyes Católicos".
María de Castilla está enterrada en el monasterio toledano, donde también reposa la momia del infante don Sancho de Castilla, hijo de Pedro I, que murió de neumonía a los siete años de edad, y a quien las monjas, como sor María Jesús Galán, la archivera del convento, llaman cariñosamente "Sanchito".
Fruto del trabajo de Cañas es su libro: "Colección Diplomática de Santo Domingo el Real de Toledo. Documentos Reales I (1249-1473)", que se publicará en febrero de 2010 con la ayuda económica de la Delegación de Cultura de la Junta de Castilla-La Mancha, CCM y el Ayuntamiento y la Real Fundación de Toledo.
El libro contiene 284 documentos que abarcan 224 años de una historia que comienza antes de la fundación del propio monasterio en 1364 y concluye en 1473, un año antes de la muerte de Enrique IV y coincide con el final del priorato de Catalina de Castilla, bisnieta de Pedro El Cruel, y priora entonces del convento.
Cañas explica a Efe que descubrió en Santo Domingo el Real todo un "mundo de documentación impresionante muy poco conocida", en abundancia y calidad que "evidencian una cercanía entre la realeza y las propias prioras y monjas del monasterio que probablemente sea única en la Corona de Castilla" y que van "mucho más allá" de la que tenían los reyes con determinadas órdenes religiosas.
"Es documentación muy cercana, muy minuciosa, en la que los reyes y las reinas intercambian con las monjas objetos de tela, cojines, en alguna ocasión ladrillos y azulejos mudéjares para construir sus palacios. Es una documentación que, en el caso de la Corona de Castilla, es única", afirma.
Este contacto tan especial se basa, según Cañas, en la "evidente" relación entre la priora María de Castilla y su madre Teresa de Ayala con la familia real, que llega hasta los Reyes Católicos.
Para Cañas, Teresa de Ayala "fue una mujer excepcional", muy poco conocida y estudiada que no solo tenía "un espíritu religioso muy atractivo para la época", sino que fue una mujer con "dotes políticas realmente notables".
Este experto medievalista otorga un valor "excepcional" a toda la documentación que ha manejado, que aporta además "una cantidad de noticias acerca de oficiales de la Corte, la propia vida religiosa y de la propia vida toledana, que la hace verdaderamente notable".
Cañas prepara un segundo volumen monográfico sobre el reinado de los Reyes Católicos, que contendrá 100 documentos de finales del siglo XV hasta 1516, y tiene previsto un tercer volumen que abarque desde el reinado de Carlos V hasta el siglo XIX.
Cañas afirma que llegar a leer "con rapidez y soltura" documentos medievales es una labor muy compleja que requiere años de formación académica y de "practicar, practicar y leer constantemente" hasta que llega un momento en que "es como si se leyera un periódico".
@EFE
Francisco de Paula Cañas Gálvez, doctor en Historia Medieval por la Universidad Complutense de Madrid, ha estudiado la documentación real que guarda el archivo del monasterio dominico de clausura, que evidencia que no solo fue un "centro religioso importantísimo" en la Baja Edad Media, sino también un importante "centro político".
Cañas, en una entrevista con Efe, explica que el intercambio epistolar entre las monjas y la realeza contiene expresiones de afecto poco usuales en la correspondencia real de la época y denotan una "muy estrecha relación".
Esto es así, en parte, a que la priora Teresa de Ayala, amante de Pedro I de Castilla, alias "El Cruel", y sus descendientes, como su hija bastarda, María de Castilla, supieron "granjearse el favor de los reyes de Castilla hasta tiempos de los Reyes Católicos".
María de Castilla está enterrada en el monasterio toledano, donde también reposa la momia del infante don Sancho de Castilla, hijo de Pedro I, que murió de neumonía a los siete años de edad, y a quien las monjas, como sor María Jesús Galán, la archivera del convento, llaman cariñosamente "Sanchito".
Fruto del trabajo de Cañas es su libro: "Colección Diplomática de Santo Domingo el Real de Toledo. Documentos Reales I (1249-1473)", que se publicará en febrero de 2010 con la ayuda económica de la Delegación de Cultura de la Junta de Castilla-La Mancha, CCM y el Ayuntamiento y la Real Fundación de Toledo.
El libro contiene 284 documentos que abarcan 224 años de una historia que comienza antes de la fundación del propio monasterio en 1364 y concluye en 1473, un año antes de la muerte de Enrique IV y coincide con el final del priorato de Catalina de Castilla, bisnieta de Pedro El Cruel, y priora entonces del convento.
Cañas explica a Efe que descubrió en Santo Domingo el Real todo un "mundo de documentación impresionante muy poco conocida", en abundancia y calidad que "evidencian una cercanía entre la realeza y las propias prioras y monjas del monasterio que probablemente sea única en la Corona de Castilla" y que van "mucho más allá" de la que tenían los reyes con determinadas órdenes religiosas.
"Es documentación muy cercana, muy minuciosa, en la que los reyes y las reinas intercambian con las monjas objetos de tela, cojines, en alguna ocasión ladrillos y azulejos mudéjares para construir sus palacios. Es una documentación que, en el caso de la Corona de Castilla, es única", afirma.
Este contacto tan especial se basa, según Cañas, en la "evidente" relación entre la priora María de Castilla y su madre Teresa de Ayala con la familia real, que llega hasta los Reyes Católicos.
Para Cañas, Teresa de Ayala "fue una mujer excepcional", muy poco conocida y estudiada que no solo tenía "un espíritu religioso muy atractivo para la época", sino que fue una mujer con "dotes políticas realmente notables".
Este experto medievalista otorga un valor "excepcional" a toda la documentación que ha manejado, que aporta además "una cantidad de noticias acerca de oficiales de la Corte, la propia vida religiosa y de la propia vida toledana, que la hace verdaderamente notable".
Cañas prepara un segundo volumen monográfico sobre el reinado de los Reyes Católicos, que contendrá 100 documentos de finales del siglo XV hasta 1516, y tiene previsto un tercer volumen que abarque desde el reinado de Carlos V hasta el siglo XIX.
Cañas afirma que llegar a leer "con rapidez y soltura" documentos medievales es una labor muy compleja que requiere años de formación académica y de "practicar, practicar y leer constantemente" hasta que llega un momento en que "es como si se leyera un periódico".
@EFE