Francia prohibe el velo islámico integral a partir del lunes
Los franceses serán los primeros en aplicar esta medida a pesar de que cuentan con la mayor comunidad musulmana de Europa. No se podrá llevar burka o niqab en espacios públicos.
FUCO REI
A partir del lunes el velo islámico integral estará prohibido en los espacios públicos de Francia, primer país europeo que aplica una medida semejante pese a que según datos oficiales sólo lo usan unas 2.000 mujeres de la comunidad musulmana aquí asentada, la mayor de Europa.
En la calle, transportes públicos, comercios, escuelas, oficinas de correo, tribunales, hospitales y administración pública estará prohibido usar burka o niqab, en virtud de esta ley impulsada por la gobernante Unión para un Movimiento Popular (UMP, derecha) y aprobada por el Parlamento francés en septiembre de 2010.
La medida entrará en vigor en Francia en medio de polémicos debates sobre el lugar del islam, el laicismo y la inmigración, impulsados por el gobierno del presidente conservador Nicolas Sarkozy.
«Nadie puede, en los espacios públicos, llevar una vestimenta que oculte su rostro», afirma una campaña de información lanzada por el gobierno bajo la consigna «la república se vive a cara descubierta».
El burka o el niqab son dos formas del velo islámico integral que cubren de la cabeza a los pies y tienen una apertura a la altura de los ojos o una rejilla para poder ver.
Según fuentes oficiales, sólo unas 2.000 mujeres, muchas de ellas francesas convertidas a la fe musulmana, usan el velo islámico integral, una práctica que además no corresponde a un precepto del islam.
Muchos en Francia, que alberga a la mayor comunidad musulmana de Europa con seis millones de personas, se preguntan cómo podrá hacerse cumplir la ley, en particular en los suburbios de fuerte presencia musulmana.
Quienes se opongan al cumplimiento de la ley recibirán una multa de 150 euros (unos 190 dólares). Los maridos o concubinos (u otra persona) que obliguen a sus parejas (o esposas) a usar el velo, podrán ser condenados a un año de cárcel y a 30.000 euros (cerca de 40.000 dólares) de multa.
El ministro francés del Interior, Claude Gueant, que desde que asumió el cargo a fines de febrero ha hecho varias declaraciones contra los musulmanes y la inmigración como afirmar que «el número creciente de fieles de esa religión y una serie de comportamientos, plantean problemas», envió una circular a las comisarías con las consignas de aplicación.
«Si una persona se niega a ser sometida a un control, se le deberán explicar las consecuencias y la posibilidad, si insiste, en llevarla a la policía o a la gendarmería para verificar su identidad», dice la circular ministerial impartida por Gueant, «hombre clave» para 2012 según el diario Liberation.
Desde hace más de dos años Sarkozy, que sigue con niveles de popularidad bajos, insiste en retomar los temas predilectos del Frente Nacional (FN, extrema derecha) ante el avance de ese partido que inclusive podría apartarlo de la segunda vuelta de las elecciones presidenciales de 2012.
La prohibición del velo islámico integral tuvo lugar tras un fracasado debate sobre la identidad nacional impulsado por el presidente francés que no dudó en vincular inmigración y delincuencia y que en las últimas semanas defendió otro fallido debate sobre laicismo en Francia.
«Si se viene a Francia, se acepta fundirse en una sola comunidad, que es la comunidad nacional. Y si no se lo quiere aceptar, no se puede ser bienvenido en Francia», afirmaba en febrero el mandatario francés, que esta semana rindió un solemne homenaje al poeta martiniqués Aimé Cesaire y a la diversidad, que algunos califican de «táctica de doble juego» con la mirada en su reelección.
Francia no estará sola en la prohibición del velo islámico integral. Suiza, Bélgica, Holanda, Dinamarca, Italia, España y Alemania estudian prohibiciones en diversos grados.
@Menos del título del post, AFP/La Voz de Galicia.es