- El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, reconoce que en la Iglesia católica «no están muy contentos» con él y su gestión y que prueba de ello es que «El Vaticano, siempre que puede» le lanza «alguna invectiva». Así lo afirma el jefe del Ejecutivo en una entrevista con ciudadanos que publicó ayer el suplemento «El País Semanal». En el encuentro, Rodríguez Zapatero dice que se mantiene una relación con la Iglesia porque ésta «tiene una penetración, una fuerza mayoritaria. Eso, añade, se mantiene a través de los acuerdos económicos, básicamente».
El presidente asegura que “la supremacía del poder civil” ha hecho posible que prevalezcan leyes que no gustan a la Iglesia. Al final del encuentro organizado por el País Semanal se produjo el siguiente diálogo entre Rodríguez Zapatero y una de las mujeres participantes:
-Quería hablar de algo que me preocupa: el poder que todavía está teniendo la Iglesia en la sociedad.
-A mí también me preocupa.
-¿No se puede hacer nada?
-Conmigo no están muy contentos, eso te lo puedo asegurar. El Vaticano, siempre que puede, me lanza alguna invectiva. Es verdad que tenemos un modelo constitucional donde dice que España es un Estado aconfesional, que por tanto establece una separación Iglesia-Estado y que tenemos que tener una relación con la Iglesia católica porque tiene una penetración, una fuerza mayoritaria. Eso se mantiene a través de los acuerdos económicos, básicamente. Es verdad que perviven algunas tradiciones, que vamos a hacer la Ley de Libertad Religiosa y a intentar ponerlo en su sitio, pero la Iglesia católica desempeña un papel porque en parte tiene apoyo social. Tienes que respetar esa presencia. Otra cosa es que muchas cosas que dicen a mí no me gusten.
-Hay cosas que dicen que te quedas a cuadros, inmiscuyéndose en terrenos que no son suyos.
-Parece claro que a nosotros no nos han afectado; hemos hecho las leyes que hemos estimado conveniente y se han enfadado con unas más que con otras, pero hemos afirmado la supremacía del poder civil de una manera clara. Es verdad que esto no pasa en ningún país. De los que yo conozco, de Europa, no hay ningún país en el que la Iglesia católica, una parte de la jerarquía, pretenda tener un protagonismo en el debate público ni el condicionamiento de la acción política. No pasa en Francia. Ni en Inglaterra. Ni siquiera en Alemania, donde también hay un cuerpo católico importante y ahora tienen al Papa... Es impensable. Pero aquí hay un peso. Si detrás no hubiera un peso social, ellos no tendrían esa actitud.
-¿Usted cree que hay tanto detrás, o son poquitos y hacen mucha bulla?
-Yo creo que hay menos que antes, pero que siguen teniendo fuerza es evidente. Y además, España, en el imaginario de la Iglesia católica y en el Vaticano, es una de las grandes constructoras del cristianismo y de la Iglesia católica. Ellos lo cuidan. Hay entre un 33% y un 35% que ponen la X en la casilla del IRPF para la Iglesia católica. Es un porcentaje a respetar. Hombre, si fueran un poco más moderados en las tesis que defienden, pues sería mejor.
@Santiago Llopis
@CAMINEO.INFO/INFOCATÓLICA
El presidente asegura que “la supremacía del poder civil” ha hecho posible que prevalezcan leyes que no gustan a la Iglesia. Al final del encuentro organizado por el País Semanal se produjo el siguiente diálogo entre Rodríguez Zapatero y una de las mujeres participantes:
-Quería hablar de algo que me preocupa: el poder que todavía está teniendo la Iglesia en la sociedad.
-A mí también me preocupa.
-¿No se puede hacer nada?
-Conmigo no están muy contentos, eso te lo puedo asegurar. El Vaticano, siempre que puede, me lanza alguna invectiva. Es verdad que tenemos un modelo constitucional donde dice que España es un Estado aconfesional, que por tanto establece una separación Iglesia-Estado y que tenemos que tener una relación con la Iglesia católica porque tiene una penetración, una fuerza mayoritaria. Eso se mantiene a través de los acuerdos económicos, básicamente. Es verdad que perviven algunas tradiciones, que vamos a hacer la Ley de Libertad Religiosa y a intentar ponerlo en su sitio, pero la Iglesia católica desempeña un papel porque en parte tiene apoyo social. Tienes que respetar esa presencia. Otra cosa es que muchas cosas que dicen a mí no me gusten.
-Hay cosas que dicen que te quedas a cuadros, inmiscuyéndose en terrenos que no son suyos.
-Parece claro que a nosotros no nos han afectado; hemos hecho las leyes que hemos estimado conveniente y se han enfadado con unas más que con otras, pero hemos afirmado la supremacía del poder civil de una manera clara. Es verdad que esto no pasa en ningún país. De los que yo conozco, de Europa, no hay ningún país en el que la Iglesia católica, una parte de la jerarquía, pretenda tener un protagonismo en el debate público ni el condicionamiento de la acción política. No pasa en Francia. Ni en Inglaterra. Ni siquiera en Alemania, donde también hay un cuerpo católico importante y ahora tienen al Papa... Es impensable. Pero aquí hay un peso. Si detrás no hubiera un peso social, ellos no tendrían esa actitud.
-¿Usted cree que hay tanto detrás, o son poquitos y hacen mucha bulla?
-Yo creo que hay menos que antes, pero que siguen teniendo fuerza es evidente. Y además, España, en el imaginario de la Iglesia católica y en el Vaticano, es una de las grandes constructoras del cristianismo y de la Iglesia católica. Ellos lo cuidan. Hay entre un 33% y un 35% que ponen la X en la casilla del IRPF para la Iglesia católica. Es un porcentaje a respetar. Hombre, si fueran un poco más moderados en las tesis que defienden, pues sería mejor.
@Santiago Llopis
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