Con la frase "El alcalde de La Carolina denigra a los musulmanes al recordar la Batalla de las Navas de Tolosa " comienza el artículo del diario El Pais donde se hace una interpretación de las palabras del alcalde que como todas las veces en las que se habla sobre los musulmanes, aunque la propia historia nos diga lo ocurrido, hay una especie de miedo o de ganas de hacer bueno lo que no lo es, demonizando a quien se atreve a decir la verdad, porque la verdad y la única realidad histórica fue que en la batalla deLas Navas de Tolosa, las tropas cristianas vencieron a las musulmanas y gracias a Dios, porque si lo que nos esperaba de no haber vencido a los musulmanes era esa "libertad" corrupta y dictatorial de los paises gobernados por algún ayatolah conocido por todo el mundo, o esa represión talibán que sufren, no solo las mujeres, aún siendo éstas las que peor lo llevan con los burkas y nihads, hoy en día nuestra sociedad sería completamente distinta, y terriblemente más injusta de lo que ya es.
Estos que cuando se habla de la cristiandad se atreven a decir de todo, en la seguridad que nadie se le acercará con un cinturón de bombas dispuesto a llevarse a los jardines de Alá a todo aquel que por su lado se cruce, pero cuando de lo que se trata es de musulmanes, parece que la obligación nuestra es la de integración, pero no de ellos en nuestras costumbres o en nuestras leyes, sino al revés, nosotros a las suyas. Parece que tenemos que pedir perdón por habernos dejado invadir barrios enteros donde no hay más ley que la que se dicta desde la mezquita clandestina en un local o garaje por el imán de turno. Pedir perdón por consentir que por nuestras calles vayan personas bajo ropas integrales de tal manera que ni la policía sabe si lo que va debajo es un hombre o una mujer. Pedir perdón porque en los comedores escolares al cocido se le eche tocino, chorizo y morcilla en vez de servir a nuestros hijos cuscus con cordero sacrificado por el matarife musulmásn autorizado y siguiendo las pautas del Corán.
Tenemos una especial afición a llamar a quien nombra a las cosas por su nombre racista, xenófobo y otros epítetos que nunca pondríamos a quiens se rien de nuestras leyes, de nuestras tradiciones, de nuestras costumbres, precisamente por miedo a que nos tachen de racistas.
El respeto debe ser mutuo, debe ser general. No vale el que un periodista clasifique a un alcalde en la lista de quien denigra a otros y se quede tan tranquilo haciendo parecer el homenaje a la Iglesia y al Ejército casi una delictiva y obsesiva afición personal del edil municipal.
Quiera el periodista, El Pais, los musulmanes o quien quiera, en la batalla de Las Navas de Tolosa, las tropas CRISTIANAS, es decir, el ejército de entonces y bajo el cristianismo, venció a las tropas musulmanas, y eso merecería en cualquier pais serio un homenaje a su historia y a sus protagonistas, le duela a quien le duela.
Seguramente en una España musulmana hoy tendría que enfrentarme a un tribunal tribal por haber vulnerado cualquier ley de la Sharía. Afortunadamente en España hay otro tipo de tribunales, mejores o peores, no lo se, pero indudablemente no caprichoso y entregado a unas obsoletas obligaciones religiosas que van desde apedrear a una mujer a decretar la busqueda y muerte que quien ellos consideren enemigo del Islam.
Vaya desde aquí nuestro homenaje a las tropas cristianas que en la batalla de Las Navas de Tolosa vencieron a las musulmanas y aunque no compartamos ideología política, nuestro apoyo a las palabras del alcade de La Carolina por su claridad y valentía.
Lean ahora el artículo de El Pais:
Un Don Pelayo del siglo XXI
El alcalde de La Carolina denigra a los musulmanes al recordar la Batalla de las Navas de Tolosa
El alcalde de La Carolina, Francisco Gallarín, del PP, se erigió ayer en una especie de Don Pelayo del siglo XXI. Lo hizo en la presentación del programa de actos con el que su Ayuntamiento quiere conmemorar el 8º centenario de la Batalla de las Navas de Tolosa, que enfrentó a cristianos y musulmanes en el siglo XIII.
La conmemoración enfrenta a los ayuntamientos del PP y a la Diputación
Esta efemérides ha abierto un conflicto político entre la Diputación de Jaén, gobernada por el PSOE, y los Ayuntamientos La Carolina, Santa Elena y Vilches, todos ellos gobernados por el PP. El desencuentro ha motivado que cada una de las partes elabore por su parte un programa de actos y que los alcaldes de los municipios donde se desarrolló la contienda acusen a la Diputación de discriminarlos al no contar con ellos.
Más allá del programa de actos, las divergencias se manifiestan en la filosofía con la que cada una de las partes enfoca esta efemérides. La Diputación cree que es una buena oportunidad para reafirmar la tolerancia y potenciar la interculturalidad. "No queremos hablar de hazañas ni de victorias heroicas; nuestro objetivo es convertir a la provincia de Jaén, a partir de los desencuentros y las contiendas que ha habido en nuestra historia, en un lugar de diálogo entre culturas, de espacio para el diálogo", señaló la diputada de Turismo, la socialista Ángeles Férriz, anterior alcaldesa de La Carolina.
Pero los alcaldes de los Ayuntamientos gobernados por el PP ponen el acento en el resultado final de la contienda, aunque eso suponga retroceder en la historia. Sostienen estos alcaldes que la Batalla "situó la frontera cristiana en Jaén, frenó la expansión almohade, precipitó el declive musulmán y allanó el camino para la reconquista del valle del Guadalquivir", al tiempo que entienden que "incidió en el apuntalamiento de la civilización occidental" y destacando su rango de cruzada.
El Ayuntamiento de La Carolina ha recreado el programa del séptimo centenario celebrado en 1912. De este modo, la programación incluirá un reconocimiento al Ejército y un homenaje a la Iglesia. De hecho uno de los actos será una misa en el campo de batalla tal y como ocurrió hace 800 años antes de entrar en combate las tropas.
@GINÉS DONAIRE, (Sevilla)/El Pais