Adega cree que Patrimonio no ha sido informada de las obras que está ejecutando la Diputación
La Diputación de Ourense sustituirá el antiguo empedrado del acceso al castillo de Monterrei por modernos adoquines grises. El primer paso se ha dado con la cubrición de la calzada con cemento. Esta rehabilitación ha sido cuestionada por vecinos de la comarca, que trasladaron su denuncia a la asociación ecologista Adega. Este colectivo presentó ayer un escrito ante Patrimonio pidiendo explicaciones sobre estas obras.
Xan Carlos Fernández, portavoz de la asociación, cree que el antiguo empedrado, cuyo origen sitúa en la época medieval, es un «vestixio a conservar» y cree que Patrimonio no ha sido informada de la actuación que se está llevando a cabo. De ser así, Fernández consideraría muy grave el proceder de la Diputación de Ourense ya que el castillo de Monterrei es un Bien de Interés Cultural (BIC) y la calzada donde se ha intervenido se encuentra dentro del perímetro de protección del monumento. Parte del empedrado podría haberse perdido ya de manera definitiva.
La obra ha sido promovida por la Diputación de Ourense en el marco del proyecto Arraiano, una iniciativa financiada por la Unión Europea con el objetivo de facilitar el desarrollo rural y urbano de los municipios fronterizos de la zona. Concretamente en la rehabilitación del acceso al castillo de Monterrei se han invertido gracias a este proyecto 66.619,99 euros.
Esta no es la única actuación en el entorno del BIC que ha generado críticas. Este verano también fue censurado el uso de maquinaria pesada en las obras de puesta en valor del Camiño Real que impulsó la Secretaría Xeral de Turismo.
Además, la asociación ecologista Adega critica el general estado de abandono del monumento. De hecho, el colectivo está preparando ya otra queja, en este caso para solicitar a la Xunta que retire las mimosas que crecen junto al inmueble. Se trata de una especie foránea cuyas raíces, según explica Xan Carlos Fernández, son «moi expansivas» y podrían afectar a la estabilidad del edificio.
@Miguel Ascón / La voz de Galicia.es