Con tan solo 24 horas de anticipación, Antena 3 nos cambia el bodrio de "El último Templario" por la horrorosa y pésima "la sangre de los Templarios". Peor no se puede realizar una serie con ese nombre, que repetimos, al igual que la otra, lo único que busca es aprovechar el tirón que representa todo lo que utilice la palabra "Templario".
Con un argumento malo, malísimo; con unas interpretaciones de las peores que se pueden ver en la pantalla, y con un resultado desanimador, es difícil que alguién acabe de ver la película sin cambiar de canal o quedarse dormido.
Ya habían emitido esta porquería antes, por lo menos dos o tres veces, y consideramos una tomadura de pelo al espectador el reponer semejante basura.
Totalmente desaconsejada la visión de este bodrio, pero si lo intentan, tengan a mano algo con lo que distraerse en los peores momentos de la misma, como un libro, revista o algo similar. La continuidad en la visión de la película es casi del todo imposible, ya que como les decimos, es completamente insoportable.