Parece ser que nuestras denuncias a la Diócesis de Lérida presentadas mediante correos electrónicos a la par que desde el blog yan han dado los frutos deseados y ese pretencioso grupo del dimitido Tamborilero de Lérida se ha visto obligado a retirar la vergonzosa campaña de recogida de limosnas "para ayuda del caballero templario", en la que se inventaban la ayuda de las iglesias de la Diócesis de Lérida para engañar a quien lo leyera y conseguir de esta picaresca manera las limosnas de quienes picaran en ese cebo. Y es que desde que cierto grupo de personas se han dado cuenta que con tan solo registrar una asociación en el Ministerio del Interior en cuya denominación figure algo referente a los templarios ya se pueden considerar una nueva Orden del Temple, aunque no los reconozca nadie y se busquen impresentables Grandes Maestres de origen desconocido y múltiples títulos, todos ellos tan falsos e inventados como los grupos estos de nueva creación, han proliferado en la península bandas organizadas para quien sabe qué.
Es absurdo, ya que solo las ramas de la Orden que dependan o reconozcan bien al Gran Maestre Fontes o la ramificación del Gran Maestre Carey pueden ser consideradas como auténticas, es decir, ramas neotemplarias con arraigo hasta por lo menos 1.705. El resto, por mucho que sus Priores se inventen que tienen encomiendas en Rusia, EEUU, y cien lugares más, no son sino mentiras que creen y recogen en un momento dado cualquier periódico local. No son más que grupitos de amiguetes, que escindidos o expulsados de las ramas principales inventan esos grupos para proseguir en sus intentos de mantenerse dentro de la Orden que no les quiere, que les ha expulsado o de la que se han ido por falsos e indignos. Son grupos a los que nunca reconocerán ninguna de las dos ramas principales, entre otras cosas porque quieren acaparar todos los cargos que puedan y no para trabajar sino para saciar esa enfermedad a la que están enganchados, la titulitis, de la que dependen como el yonky a la heroína.
Mal que les pese, en España solo están reconocidas por los Grandes Maestre antes citados la Encomienda de San Simón por la rama del Gran Maestre James Carey y la OSMTJ y las representadas por el Consejo Nacional Templario Español, que pertenecen a la rama del Gran Maestre Fr.+++Fernando Pinto de Sousa Fontes, entre las que nos encontramos. El resto, aunque digan que nunca han pedido el ingreso en el CNTE, es que nunca podrían entrar y no están reconocidas por nadie más que por el Ministerio del Interior como cualquier otra asociación normal y corriente que se dedicara a jugar a la petanca o a las chapas, por ejemplo, pero carecen de reconocimiento por el resto de grupos a nivel nacional e internacional.
Podrán hacer cuantas investiduras caballerescas que quieran, pero nadie de los asi investidos, ninguno de ellos, será reconocido como caballero por ninguna de las ramas reconocidas internacionalmente y dependiente de alguno de los dos Grandes Maestres citados, mientras los investidos en cualquiera de las otras ramas reconocidas si gozan de ese estatus, de manera que cualquier caballero de la OSMTJ , de la SMOTH-MIT, de la OMECT, del GRAN PRIORATO DE HISPANIA, del GRAN PRIORATO DEL REINO DE ESPAÑA o de MILICIA DEL CATOLICISMO o de la ENCOMIENDA DE SAN SIMON siempre será reconocido como tal por el CONSEJO NACIONAL TEMPLARIO ESPAÑOL, pero solo ellos, nunca cualquier otro proveniente de esos grupúsculos de presuntos templarios.
Por eso esas declaraciones pretenciosas que dicen a un pequeño periódico local "No dejamos que el Vaticano nos influya" realizadas por un presunto Prior General no dejan de ser más que eso, unas pretensiones de algo de lo que carecen, ya que no es que no dejen que el Vatiano les influya, es que realmente EL VATICANO NI CONOCE NI LE IMPORTA LA EXISTENCIA DE ESOS GRUPÚSCULOS DE RECREACIONES HISTÓRICAS, que no es lo mismo.
Que nadie caiga en el error de creer que esos señores representan algo que no sea más que lo suyo particular, sin conexiones con nadie, sin reconocimientos de nadie. Esas pseudoórdenes, disfradadas a veces con nombres de órdenes serias y reconocidas, como la de San Lázaro y que ellos han rebautizado como Cuerpo de San Lázaro ante la imposibilidad de entrar en la verdadera Orden de San Lázaro, no son más que réplicas realizadas con el fin de atraer a incautos, mareándoles con palabrería de charlatán de feria, mucha palabrería de pilotos, vuelos, aviones, helicópteros, etc. cuando la realidad es que ni helicópteros, ni aviones, ni labores humanitarias ni nada de nada, y sino, que citen una sola labor humanitaria en la que hayan participado ellos mismos, que la hayan llevado a cabo, que se pueda comprobar, UNA SOLA.
Todo falso, todo revestido de oropeles, de bisutería barata de galones y bastones de generales de brigada, con fines ególatras y quien sabe que más. TENGAN CUIDADO CON ELLAS Y NO SE DEJEN ENGAÑAR.