Apreciables Hermanos en Cristo:
Para mi representa un honor poder dirigir unas palabras a mis Hermanos en México.
México, hermanos míos está pasando, como todo el mundo, por una severa crisis económica. Lamentablemente no solo la economía nos viene afectando como grupo social, y me voy a referir exclusivamente a la Amada Orden a la que pertenezco, a SMOTH-MIT.
México, Hermanos, está pasando por una crisis severa que muchos de los que van entre sus aguas han sido quienes han fomentado este caos. Es muy sencillo comprender que existe una gran contradicción porque, como mexicanos, deberíamos ir en busca de un dirigente mexicano, sin embargo se ha tolerado que un argentino venga a nuestro territorio y difame, engañe, robe, insulte a los mexicanos. Los peor de todo es que ha habido quienes le han puesto la otra mejilla solicitando que su bendita mano les vuelva a golpear.
No me interesa en esta ocasión juzgar al innombrable, ni su famoso séquito. A mi, Andrómeda Zavala, lo que me interesa es que comprendamos que, como lo lleva implícito en el nombre, esto lleva un ORDEN.
Por parte de la SMITH-MIT, en México, si llevamos un orden. Con el reconocimiento y validez oficial por parte de España, como se ha expuesto en muchas ocasiones. Se ha exhibido también las firmas de los tratados de Amistad con otras Ordenes Templarias, lo que nos da un grado de madurez y tolerancia. Dentro de estas Órdenes figura la de Fontes, por lo que el innombrable no tendría autoridad moral para declarar que el Príncipe Regente siga siendo su amparo y protección.
Con las circunstancias por las que nuestro país está pasando, y que sabemos que está a punto de un severo desplome político y económico, deberíamos estar unidos en objetivos comunes, con miras a buscar encontrar una solución a nuestros problemas. El tiempo, la energía y las finanzas se gastan en agresiones verbales, sean orales o escritas. Si se ha demostrado, mas que demostrado que el innombrable es menos que una nulidad, y que legalmente se ha comprobado la regularidad de nuestra Orden, entonces ¿por que no trabajar en equipo?, ¿Por qué seguir fomentando el engaño y nuestra propia autodestrucción?
Es de humanos errar, es de sabios aceptar equivocarse, incluso, yo, al principio confié en el innombrable e incluso lo recomendé. Me equivoqué. Pero siempre mantuve arraigados mis propios principios y valores, sin deberle lealtad y fidelidad mas que a Dios y a mi conciencia, y después a quienes vi que hacían un esfuerzo sobrehumano por hacer que México creciera. Hay que ser apenas un poco mas fuerte que un pinito para resistir las tormentas y mantenerse siempre en nuestros propios ideales, pero, en verdad les digo: se puede.
También debo aceptar una realidad: de no ser por el innombrable, yo no me habría ordenado. Los juicios corresponden a Dios. Sin embargo, me gustaría exhortar a TODOS, TODOS LOS +HERMANOS EN MÈXICO, que bajemos la guardia y la lealtad a los individuos. Debemos lealtad a Dios, a nuestra Patria y a nuestra Familia. Dejemos de lado los conflictos, y cada quien en el grupo al que decida pertenecer fíjese como objetivo trabajar por la sociedad, por quienes lo necesitan, por los huérfanos, los ancianos, los desvalidos, por mejorar la relación con tu esposa (o) e hijos, por ver que puedes cocinar para obtener recursos, incluso por ti mismo, pero siempre pensando en aquel que te dio la oportunidad de ser.
NON NOBIS
Sor.++Andrómeda Antinea Zavala García
Priora del Priorato de México
Octubre del Año de Nuestro Señor Jesucristo 2008.
Para mi representa un honor poder dirigir unas palabras a mis Hermanos en México.
México, hermanos míos está pasando, como todo el mundo, por una severa crisis económica. Lamentablemente no solo la economía nos viene afectando como grupo social, y me voy a referir exclusivamente a la Amada Orden a la que pertenezco, a SMOTH-MIT.
México, Hermanos, está pasando por una crisis severa que muchos de los que van entre sus aguas han sido quienes han fomentado este caos. Es muy sencillo comprender que existe una gran contradicción porque, como mexicanos, deberíamos ir en busca de un dirigente mexicano, sin embargo se ha tolerado que un argentino venga a nuestro territorio y difame, engañe, robe, insulte a los mexicanos. Los peor de todo es que ha habido quienes le han puesto la otra mejilla solicitando que su bendita mano les vuelva a golpear.
No me interesa en esta ocasión juzgar al innombrable, ni su famoso séquito. A mi, Andrómeda Zavala, lo que me interesa es que comprendamos que, como lo lleva implícito en el nombre, esto lleva un ORDEN.
Por parte de la SMITH-MIT, en México, si llevamos un orden. Con el reconocimiento y validez oficial por parte de España, como se ha expuesto en muchas ocasiones. Se ha exhibido también las firmas de los tratados de Amistad con otras Ordenes Templarias, lo que nos da un grado de madurez y tolerancia. Dentro de estas Órdenes figura la de Fontes, por lo que el innombrable no tendría autoridad moral para declarar que el Príncipe Regente siga siendo su amparo y protección.
Con las circunstancias por las que nuestro país está pasando, y que sabemos que está a punto de un severo desplome político y económico, deberíamos estar unidos en objetivos comunes, con miras a buscar encontrar una solución a nuestros problemas. El tiempo, la energía y las finanzas se gastan en agresiones verbales, sean orales o escritas. Si se ha demostrado, mas que demostrado que el innombrable es menos que una nulidad, y que legalmente se ha comprobado la regularidad de nuestra Orden, entonces ¿por que no trabajar en equipo?, ¿Por qué seguir fomentando el engaño y nuestra propia autodestrucción?
Es de humanos errar, es de sabios aceptar equivocarse, incluso, yo, al principio confié en el innombrable e incluso lo recomendé. Me equivoqué. Pero siempre mantuve arraigados mis propios principios y valores, sin deberle lealtad y fidelidad mas que a Dios y a mi conciencia, y después a quienes vi que hacían un esfuerzo sobrehumano por hacer que México creciera. Hay que ser apenas un poco mas fuerte que un pinito para resistir las tormentas y mantenerse siempre en nuestros propios ideales, pero, en verdad les digo: se puede.
También debo aceptar una realidad: de no ser por el innombrable, yo no me habría ordenado. Los juicios corresponden a Dios. Sin embargo, me gustaría exhortar a TODOS, TODOS LOS +HERMANOS EN MÈXICO, que bajemos la guardia y la lealtad a los individuos. Debemos lealtad a Dios, a nuestra Patria y a nuestra Familia. Dejemos de lado los conflictos, y cada quien en el grupo al que decida pertenecer fíjese como objetivo trabajar por la sociedad, por quienes lo necesitan, por los huérfanos, los ancianos, los desvalidos, por mejorar la relación con tu esposa (o) e hijos, por ver que puedes cocinar para obtener recursos, incluso por ti mismo, pero siempre pensando en aquel que te dio la oportunidad de ser.
NON NOBIS
Sor.++Andrómeda Antinea Zavala García
Priora del Priorato de México
Octubre del Año de Nuestro Señor Jesucristo 2008.