La Fiscalía facilita a las autoridades locales nombres y domicilios para evitar reincidencias
La fiscalía belga ha elaborado la lista a partir de la operación Kelk, la investigación judicial sobre los múltiples crímenes de pederastia en el seno de la iglesia belga, y que se basó en parte en los registros realizados a la Conferencia Episcopal belga y a la comisión designada por ésta para tratar este tipo de casos.
Pese a que la mayoría de los delitos ha prescrito al haberse cometido hace más de 30 años, la fiscalía ha decido distribuir los datos personales de los religiosos que siguen con vida con el fin de facilitar su control por parte de las autoridades locales, según publicaba ayer el diario flamenco Het Laatste Nieuws.
@Menos del logo de la campaña, EFE