La ilusión de los +Hermanos.

Estamos ya casi quemándonos con el Primer Congreso Nacional Templario. Los emails y los teléfonos ultimando los detalles de los puntos del Orden del Día. La comunicación entre +Hermanos de diferentes ramas. La relación oficial y extra oficial entre dirigentes de la organizaciones convocantes y participantes. Los comentarios, las esperanzas, las expectativas.

Nada de eso nos hace olvidar a los +Hermanos que se investirán, que darán el gran paso de entrar a formar parte de la Blanca Milicia ya desde su nueva condición de Damas y Caballeros.
El Congreso es importantísimo para el futuro de la Orden en España, pero no hay que olvidar que la Investidura de nuevos +hermanos es algo tan importante y maravillosos que no puede ser eclipsado por nada.

Nos escriben algunos de los +Hermanos que hasta dentro de nada continuarán siendo de Capítulo hablándonos de sus nervios, de sus ilusiones ante la Ceremonia de Investidura, y eso nos trae recuerdos de la nuestra propia, de aquel día que recibimos sobre los hombros el Blanco Manto que nos distinguía como Caballeros de Cristo, que nos obligaba de por vida a un comportamiento acorde a los de aquellos que nos precedieron en la Pobre Milicia de Nuestro Señor, y entendemos los nervios, la ansiedad y al mismo tiempo el temor ante una Ceremonia d ela que desconocen todos los detalles, pero para la que están preparados desde hace ya bastante tiempo.

Y además han tenido la gran suerte de compartir esa esperiencia única con los miembros de las distintas ramas que estarán presentes para el Congreso del día después. En fin y resumiendo, que van a vivir unos días intensos, unos días de los que que no se olvidarán nunca y en los que estarán arropados por los Baussantes de los +Hermanos que desde toda la geografía española han viajado para estar junto a ellos y después intentar establecer lazos que nos lleven a una unificación futura para que nuevos y futuros +Hermanos que nos sucedan encuentren una Orden Grande y Unida para mayor Gloria de Nuestro Señor.

El gran día se acerca, está ya aquí. Bienvenido sea.