Gran Maestre, es ya hora de que empuñeis la espada y os pongais a la cabeza de esa necesaria limpieza que la Orden os demanda.

Después de todas las noticias dadas desde el blog de Fratertempli. Después de todas las denuncias públicas que hemos hecho, todas ellas probadas por los mismos que denunciábamos. Después de todo el movimiento que han provocado estas lineas en el mundo neotemplario y los cambios que ha habido en dichas organizaciones, uno, sentado en la soledad del teclado del ordenador piensa que hay un Gran Maestre, que si bien es verdad que en la mayoría de los casos ha sido engañado y en ocasiones de manera grave, muy grave para la buena salud de la Orden, estando enterado como todos sabemos de estas denuncias probadas, ya que hay Caballeros de la Orden muy próximos a él que le cuentan lo que aquí se escribe, no puede por más tiempo evitar el tomar parte e impartir la justicia a la que su cargo le obliga.


Estando como estamos todos de acuerdo en dejarle terminar sus días como Gran Maestre, sin molestarle e importunarle lo más mínimo, y aunque alguno de nosotros, entre los que se encuentra el administrador de este blog, (es decir un servidor), no aceptaba "la herencia" del cargo, pensando que el título y cargo de Gran Maestre nunca se da por herencia, al final hemos transigido y aceptado eso en pos de la unidad en las ramas y por el bien de la Orden.


Pero es ya del todo imposible que se continue actuando según la política del avestruz, es decir, meter la cabeza bajo el suelo para no ver lo que sucede. Debe de una vez por todas actuar como Gran Maestre, y tomar las resoluciones debidas ante las farsas que se están produciendo sobretodo en Latinoamérica y el "gazpacho", la mezcla de farsantes, que se ha colado en la Orden por la puerta de atrás.




Donde se dieron antes sin conocer nada de dichos sujetos "Grandes Cruces" y "Visitadores Magistrales" por el mero hecho de haber viajado hasta un pais europeo en una ocasión, debe haber ahora expulsiones y limpieza, una limpieza que viene siendo demandada por los +Hermanos y +Hermanas latinoamericanos en unión de los europeos ante las aberraciones que se están produciendo dentro de esos prioratos latinoamericanos de la rama de Fontes, que ante su pasividad e ignorancia de la mayoría de los mismos van cobrando "patente de corso", y creando una nueva orden a su justa medida que nada tiene que ver con la Orden del Temple, de la que se llaman auténticos descendientes, (demostrando su completo analfabetismo en cuestiones templarias), ni tan siquiera con el resto de las ramas neotemplarias descendientes por lo menos desde 1.705.


Sabemos de su edad y del peso que ha significado llevar adelante durante tanto tiempo la representación de una parte de la Orden, (la otra parte no le reconoce, como ya sabemos, y tiene su propio Gran Maestre), pero es una lástima que al final no pueda contener la desvergüenza y el deshonor en sus propias filas. Quizás los Priores y Grandes Priores, asi como los Consejos de ramas agrupadas deberían ayudarle a tomar cartas en el asunto, apoyándole a la hora de tomar resoluciones, que aunque a priori pudieran parecerle que son traumáticas, a largo plazo significaría la expansión de la Orden limpia de farsantes y payasos, logrando el respeto y la consideración que ahora mismo se la niega en Latinoamérica, gracias, como decimos, a los falsos e indignos mandatarios que en su momento Fontes, engañado o ignorante, consintió.

Gran Maestre, con todos los respetos hacia vuestro cargo, es hora de que empuñeis la espada, (en sentido figurado, claro), y os pongais a la cabeza de esa necesaria limpieza que la Orden os demanda en Latinoamérica. No podeis consentir que las cosas continuen por ese camino, por el bien de la Orden y el respeto hacia nuestra tradición.