BARRA ORDEN DE LOS POBRES CABALLEROS DE CRISTO DEL TEMPLO DE JERUSALEM.BARRAORDEN DEL TEMPLEBARRA
FRATERTEMPLI - ORDEN DEL TEMPLE, el blog: SEGUNDO DISCURSO DE GUILLAMME DE PLAISIANS, MINISTRO DE FELIPE IV, EL DIA 14 DE JUNIO DE 1308
FRATERTEMPLI, EL BLOG DECANO DE LA ORDEN DEL TEMPLE EN INFORMACIÓN TEMPLARIA, RELIGIOSA Y MEDIEVAL

LA RELIQUIA

LA RELIQUIA
LA CASA FOX, EN PODER DE LA RELIQUIA DESDE EL 191 AL 902 AÑO DEL TEMPLE

“AÑO 191 DEL TEMPLE, (1309), UNOS 40 CABALLEROS TEMPLARIOS PROCEDENTES DE LOS CASTILLOS DE MONZÓN Y CHALAMERA DIRIGIDOS POR SU COMENDADOR FR.++BERENGUER DE BELVIS RESISTEN A DURAS PENAS EN EL CASTILLO DE MONZÓN EL ASEDIO DE LAS TROPAS DE JAIME II DIRIGIDAS POR EL PROCURADOR GENERAL ARTAL DE LUNA. RENDIDO EL CASTILLO, EL COMENDADOR TEMPLARIO HACE ENTREGA DE SU CRUZ PECTORAL AL CONQUISTADOR DE LA FORTALEZA ARTAL DE LUNA, CON LA ÚNICA CONDICIÓN DE QUE NO LA DEJARA CAER EN MALAS MANOS, MANOS SACRÍLEGAS, ES DECIR, EN LAS MANOS DE LA IGLESIA, PARA QUE NO DESAPARECIERA. ARTAL DE LUNA CUMPLE SU PALABRA Y ENTREGA LA CRUZ A LA MADRE DE UN TEMPLARIO, DEFENSOR DEL CASTILLO. LA RELIQUIA LLEGA POR ESTA VÍA A LA TEMPLARIA CASA FOX, QUE LA CUSTODIA HASTA NUESTROS DÍAS. DONDE ESTÉ LA CRUZ ESTÁ LA ORDEN. ASI HA SIDO Y ASI SERÁ, PESE A LOS INTENTOS DE APROPIACIÓN POR PARTE DE ELEMENTOS AJENOS A LA MISMA AUNQUE EN ALGUNOS CASOS VISTIERAN NUESTRO BLANCO MANTO. ROGUEMOS A LA CRUZ PARA QUE CON LOS DELINCUENTES QUE PROTAGONIZARON LOS DESHONROSOS Y DELICTIVOS HECHOS OCURRIDOS EN EL SIGLO XX EN BELVER DE CINCA CON LOS RESTOS DE LOS DEFENSORES DE LOS CASTILLOS DE MONZÓN Y CHALAMERA Y VECINOS TAMBIÉN ALLÍ ABANDONADOS SE HAGA JUSTICIA Y LOS RESTOS DE LOS CABALLEROS TEMPLARIOS Y DE LOS VECINOS PROFANADOS Y EXPOLIADOS JUNTO A ELLOS ABANDONEN EL VERTEDERO Y EL OSARIO PARA QUE, UNA VEZ ENTREGADOS A QUIEN DESDE EL PRIMER MOMENTO DEL EXPOLIO Y LA PROFANACIÓN NO CESA EN ESTA LUCHA DE DAVID CONTRA GOLIATH, RETORNEN DE SU MANO A LA SEPULTURA DIGNA DE LA QUE NO DEBIERON SER PRIVADOS EN DONDE DISPONGA EL HEREDERO DE LA CASA FOX, TEMPLARIO INCANSABLE Y LUCHADOR INAGOTABLE AL QUE TODAS LAS RAMAS DE LA ORDEN Y DEMÁS GENTE DE BIEN DEBIERAMOS AYUDAR EN SU BÚSQUEDA DE JUSTICIA Y REPARACIÓN DE LOS DAÑOS CAUSADOS. ES NUESTRA OBLIGACIÓN."

¿CONTINUAREMOS MIRANDO PARA OTRO LADO MIENTRAS LOS RESTOS DE LOS +HERMANOS SIGUEN EN EL VERTEDERO?

SI QUIERE CONOCER LOS HECHOS, EL LUGAR DONDE SE PROFANARON LAS TUMBAS DE ANTIGUOS CABALLEROS TEMPLARIOS. SABER QUIENES SON LOS PROTAGONISTAS Y CULPABLES DE LA SACRÍLEGA PROFANACIÓN Y POSTERIOR ABANDONO DE LOS RESTOS HUMANOS EN EL VERTEDERO DE BELVER, ENTRE EN EL BLOG DE BELVER DE LOS HORRORES

Burofax enviado por D. Miguel Fox a Fernando Elboj Broto

Burofax enviado por D. Miguel Fox a Fernando Elboj Broto
Belver de los Horrores

UNIDAD DE ACCIÓN

DESDE HOY, 1 DE MARZO DE 2012, EL BLOG DE BELVER DE LOS HORRORES SE UNE AL BLOG DE FRATERTEMPLI, PASANDO A SER PARTE DEL GRUPO FRATERTEMPLI, ORDEN DEL TEMPLE.

CUALQUIERA PUEDE ACCEDER AL MISMO PULSANDO TANTO EN LA RELIQUIA, COMO EN LOS MÚLTIPLES ENLACES QUE EN FRATERTEMPLI HAY PARA ACCEDER A BELVER DE LOS HORRORES.

NO DESCANSAREMOS HASTA QUE SE HAYA HECHO JUSTICIA CON "LOS MUERTOS DEL VERTEDERO Y LA CASA FOX"


NNDNNSNTDG

POR SI HAY ALGÚN DESPISTADO.

Para que si alguien, despistado o intencionado, cree o dice que nos ha escrito no siendo verdad, y aunque desde la creación del blog está en la parte inferior del mismo nuestra dirección de correo electrónico, nuestro email es fratertempli@yahoo.es , siendo el máximo responsable de lo que aquí se dice, Fr.+++ Anselmo de Crespi.


SI TARDA UNOS MOMENTOS EN CARGAR LA SIDEBAR, (PARTE DERECHA), LES PEDIMOS DISCULPAS, PERO SERÁN SOLO UNOS BREVES MOMENTOS LO QUE TARDE.




NADA DE LO QUE APARECE EN FRATERTEMPLI ES MENTIRA

JURO QUE TODOS LOS COMUNICADOS QUE APARECEN EN EL BLOG DE FRATERTEMPLI SON CIERTOS, QUE EN ESTE BLOG NADA ES MENTIRA SALVO LAS BROMAS E INOCENTADAS DEL DÍA DE LOS INOCENTES.

TODO AQUEL QUE POR LOS MOTIVOS QUE FUERAN, SOBRE TODO POR INTERESES ECONÓMICOS PERSONALES, DIGA O PUBLIQUE QUE ALGUNO ES MENTIRA, QUE LO DEMUESTRE Y VAYA A LOS TRIBUNALES DE JUSTICIA. MIENTRAS NO HAGAN ESO, EL RESTO DE DESMENTIDOS POR PARTE DE LOS QUE SE ALIMENTAN DE ESTAFAS Y DE SACAR DINERO A COSTA DE LA ORDEN DEL TEMPLE, NOS DAN IGUAL, PUES POR SUS HECHOS LOS CONOCEREIS, Y FRATERTEMPLI NUNCA HA MENTIDO SABIÉNDOLO QUIEN NOS SIGUE, Y ESTAMOS ACOSTUMBRADOS A AMENAZAS DE DENUNCIAS QUE NUNCA LLEGAN POR SER SIEMPRE CIERTO LO QUE PUBLICAMOS.

FTAT, NND. Fr. +++Anselmo de Crespi,

que por cierto, y para algún ignorante, es mi nombre iniciático, no es un alias, ni un nick tras el que esconderme, ni por supuesto mi nombre de pila. Y no soy conde, ni marqués, ni tengo ningún título de esos que como en Illescas, (Toledo), compran algunos y que son más falsos que ellos mismos.

sábado, 1 de marzo de 2014

SEGUNDO DISCURSO DE GUILLAMME DE PLAISIANS, MINISTRO DE FELIPE IV, EL DIA 14 DE JUNIO DE 1308

NOTA DE FRATERTEMPLI:

Se advierte en este discurso como las amenazas a Clemente V ya son abiertas y descaradas, presionándole para que deje a un lado su tibieza y se declare abiertamente contra nuestra amada Orden y nuestros queridos +Hermanos. Para ello no duda en utilizar cualquier argumento que lepermitiera seguir los dictados del ambicioso monarca francés al que se debía.

De nuevo, como ayer, agradecemos a nuestra estimada Hermana +Laura Sanchez por la traducción del francés al castellano del documento que hoy subimos al blog de Fratertempli, trabajo suyo sin el cual no habriamos podido hacerlo. 
Gracias +Hermana.

NND, FTAT, +Anselmo de Crespi

+++++++++++++++++++++++++++++++

Muy Santo Padre, vos conocéis lo que ha sido escrito por Dios, nuestro maestro, creador de nuestro mundo y libre de pecado: ¿Quién de vosotros me acusará de pecado? Dirigiéndose al pueblo judío, dejó esta frase como ejemplo a sus futuros vicarios en la Iglesia de Dios, con el fin de que, si llegaban a pecar, no desdeñaran, a causa de su dignidad eminente, ser acusados de pecado, al igual que el bienaventurado Pedro, que fue recriminado no solamente dos veces por Dios, sino que también lo fue después por Pablo, y con el fin de que desdeñen aún menos el recibir algunas veces y de buen grado de los pequeños cualquier consejo sobre la conducta a mantener para evitar el pecado y, por tanto, el escándalo. Más vale, en efecto, intervenir antes de que un asunto se vea comprometido que tener que buscar un remedio más tarde; y el Señor puede revelar a los pequeños, según su palabra divina, lo que puede ser de provecho para los grandes.


Santo Padre, he aquí que se presenta el asunto de los Templarios. Un clamor poderoso se alza hacia Dios y hacia vos, su lugarteniente: y ahora es cuando se puede separar la cizaña de la cosecha, quitarla y echarla al fuego. El rey católico, el rey de Francia, no como acusador, denunciante o promotor especial, sino como ministro de Dios, campeón de la fe católica, celador de la fe divina para la defensa de la Iglesia según las tradiciones de los santos Padres, sobre lo que tendrá que dar cuentas a Dios (aunque la mayoría le hayan sugerido haber extirpado la herejía de los Templarios por su propia autoridad, como se sabe que fue prescrito por Dios e instituido por los santos Padres, y si alguna autoridad ha decidido en contra, no habría que seguirla, sino obedecer a Dios y a sus preceptos), el rey, por tanto, dirigiéndose a Su Reverencia como un hijo respetuoso, ha requerido de vos tres cosas sin duda necesarias para la extirpación de la citada perfidia: la primera es que os encarguéis de estimular a los prelados ordinarios de su reino y a los otros prelados de los otros reinos para que, en sus respectivas diócesis, ejerzan su oficio en lo que respecta a las personas del Temple en particular; la segunda es que la suspensión que habéis pronunciado contra los inquisidores de la herejía establecidos por la autoridad apostólica sea revocada; la tercera es que la citada orden de los Templarios, que debería más bien ser considerada como una secta condenada, deba ser, por provisión apostólica, totalmente expulsada de la Iglesia, como un vaso realmente inútil y lleno de escándalo.


Sobre esto Vuestra Santidad ha contestado de una forma general, sin decir no obstante nada preciso sobre el caso en particular; habéis visto que los espíritus de los auditores presentes fueron muy sorprendidos y que esto determinó en todos un grave escándalo. Ya que unos sospechan que vos queréis favorecer a los Templarios, como se dice de algunos de vuestros hermanos; se sabe que los Templarios se han vanagloriado de ello en varios lugares de palabra y por escrito. Otros, en cambio, ponen en duda el pecado de los Templarios, que es claro y seguro, viendo que habéis respondido como si dudarais. Por lo demás, Vuestra Santidad debe ocuparse rápidamente de uno y de otro escándalo con el fin de que, como tenéis realmente una inclinación por lo justo y por el bien, lo probéis a través de los actos y de este modo vuestras obras brillen a los ojos de los hombres para glorificar a Dios Padre, según la doctrina de Jesucristo.


Aunque, en efecto, cuando no se puede intervenir en un escándalo así sin pecado o sin olvidar la salud eterna, hay que responder sobre el tema a los autores del escándalo: dejar hacer, porque están ciegos y guían a ciegos, y que no haya lugar por tanto de ocuparse del escándalo, sin embargo, cuando se puede intervenir sin pecado, a pesar de que pudiera ser por otra parte ventajoso y lícito no hacerlo, hay que intervenir inmediatamente, según lo aconsejan el Evangelista, la doctrina apostólica y canónica; o bien, entonces, como lo dijo el Apóstol, Vos matáis, aunque sea injustamente, las almas de los que son escandalosos y para la salud de por quienes el Cristo ha muerto. Y es por esto que el Señor pagó por él ordenó pagar el tributo, para que otros que no lo conocían como Dios no se escandalizaran por él. De este modo, el Apóstol, que había aprobado el consumo de carne y de otros alimentos, dijo sin embargo de suprimir las ceremonias, ya que ya no volvería a comer carne en el futuro, para no escandalizar a su hermano, para no matar el alma de su hermano por quien Cristo murió; y del mismo modo, Dios dijo: Si tu ojo te escandaliza, etc. Este me escandaliza porque escandaliza a mi hermano; ya que somos un solo cuerpo en Cristo, somos miembros que sufrimos unos por otros y ningún miembro del cuerpo puede sufrir sin que sufran los demás, como el Apóstol bien dice.


Así, padre de familia de la casa de Dios, sabéis que a esta hora el diablo, como un ladrón, ha venido para penetrar en vuestra casa. Ya os ha sustraído furtivamente a las ovejas del Temple, trastocadas en lobos, y se esfuerza por llevarse a las que se han quedado en el rebaño; ha penetrado en vuestra casa, la que habéis edificado, con los fieles a modo de piedras, sobre el Cristo, que es la piedra angular. Tened cuidado por tanto; que ni el sueño ni el terror os tomen, oponeos al ladrón, como un muro para la defensa de la casa de Dios; haced huir al ladrón, suprimid el escándalo de la santa Iglesia de Dios desterrando al perverso y reconfortando al mismo tiempo a los demás con la palabra, con las obras, con el ejemplo.


Que si no lo hacéis prontamente, considerad qué gran confusión derivará para Vuestra Santidad; grande sin lugar a dudas, porque los príncipes y los pueblos, viendo que no lo hacéis, lo harán ellos mismos, sin contar con vos. En efecto, es de la fe católica que vivimos; es en ella en lo que consiste lo que somos: un solo cuerpo con Cristo; es de ella y por ella que somos llamados, en Cristo nuestro Señor, los hijos de Dios, según lo dice Juan en el Evangelio y, por tanto, sus herederos, si somos sus hijos, según el Apóstol.


¿Quién, por tanto, en consecuencia, puede renegar de la fe católica, derribarla, sin que afecte a toda la vida y a toda la substancia de cada uno de nosotros? ¿Quién puede alcanzar gravemente la cabeza, es decir a nuestro Señor Jesucristo, incluso, golpearla esforzándose por cortarla completamente, sin atacar al cuerpo entero? Si por tanto la mano derecha, es decir el brazo eclesiástico, se sustrae a la defensa de este cuerpo sagrado, ¿el brazo izquierdo, es decir la justicia temporal, no se levantará para su defensa? Y si faltan los brazos, el uno y el otro, ¿los otros miembros, los pies y las otras partes del cuerpo, por ejemplo los pueblos, no se levantarán para defenderlo, debido a la necesidad? En efecto, donde hay peligro y donde no hay juez, ni defensor o ministro, cualquiera debe defenderse y defender también a su vecino; ya que, si no lo hiciera, se expondría a la condenación, como lo enseñan el derecho civil y los decretos de los santos Padres. En efecto, lo que se comete en perjuicio de Dios, se considera como una injuria para todos, como está escrito. Por tanto, de todo lo que precede, se concluye que abandonaríais a otro vuestra gloria atada al servicio de Dios, lo que sería vergonzoso para vos.


Segundamente, se derivaría una confusión más grave. En efecto caéis en un grave peligro para vuestra situación si sólo aplazáis el asunto. En efecto, el agresor es amenazante; si no lo repeléis rápidamente, cogerá fuerzas; es más, es de temer que consiga la victoria. Entonces si tardáis en intervenir, no se puede negar que favorecéis a vuestros adversarios, por lo que caéis vos en la acusación de ser partidario de ellos. Anastasio, por sí mismo, fue un buen papa; quería revocar secretamente al hereje Acacio, que él mismo había condenado; por otra parte no aceptaba sus errores, pero, ya que procedía con tibieza y que, en la causa de la fe, no se mostraba tan ferviente como debía, fue golpeado por Dios y, con anterioridad, rechazado por el clero como partidario suyo. Porque el Señor ordena que nos apresuremos en comer el cordero; la despreocupada negligencia de un prelado es tomada como consentimiento al error. En efecto, el error al que no se resiste, se aprueba, como lo enseñan los decretos de los santos Padres, y, a los ojos de Dios, es mucho más abominable proceder en materia de fe con retraso o con lentitud que abstenerse completamente, así como Dios lo dijo a cierto prelado: !Ojalá fueses frío o caliente! Pero por cuanto eres tibio, y no frío ni caliente, te vomitaré de mi boca. (Apocalipsis)


Terceramente, se derivaría una tercera confusión, muy grave y doble: una es que la herejía de los Templarios que, al menos, antes se escondía, ahora es patente, como el fuego alumbrado que ha sido incubado durante largo tiempo y que tendrá tanta más fuerza como se tarde en apagarlo, y que incendia las casas del vecino; ya que aquellos que quedan, innumerables, pecaban siguiendo su ejemplo, y ahora, en el mundo entero, muchas almas débiles están trastornadas en su fe. La otra confusión es que las almas débiles estarás irritadas con la Iglesia romana que no se apresura en intervenir, y que, justamente escandalizadas por ella, despreciarán su disciplina y caerán en el pecado, ¡oh, dolor!


Por tanto, santo Padre, veis el fuego del hogar ardiendo, quemando las casas de los mejores; la Iglesia de Francia entera, donde este fuego, hasta ahora escondido, así como en los otros reinos, se revela ardiente, la Iglesia de Francia, digo, clama en el soplo de su devoción: “¡Fuego, fuego! ¡Socorro, socorro!”. Que la torpeza no os invada, ni el sueño, ni las trampas del diablo, es decir los argumentos capciosos; ya que las discusiones instituidas con tales procesos son ardides del diablo, los testículos de Leviatán, por los que se seduce a la plebe de los pueblos. Por otra parte, las murallas de los vecinos se desmoronarán, se quemarán sus casas, y vos – no lo quiera Dios – podréis temer la sentencia dictada contra el gran padre Elías, quien expiró cayendo de su púlpito, haciéndose pedazos la cabeza, y contra el citado Anastasio, que tan duramente fue castigado por Dios.


De estos peligros, que atraéis hacia vos y hacia vuestros súbditos, ¡pueda Dios defender a su Iglesia! La realidad del error de los Templarios es evidente; no se debe permitir que los testículos y las ligaduras del diablos ya citados impidan la pronta administración de la justicia en una causa que incumbe a la fe; ya que no observar las formas jurídicas en semejante proceso es conservarlas, y no hay que preocuparse por quiénes han sacado a la luz los crímenes de los Templarios, aunque se descubran ante laicos y no ante inquisidores o sus comisarios o los ordinarios: todos los afectados por el tema están llamados a defender la fe.