Hasta donde mi familia y yo sabemos, de momento y quiera Dios que por mucho tiempo, no tengo cáncer, ningún tipo de cáncer, ni me he mordido la lengua ni me he envenenado. Lo siento por esos que frotándose las manos celebraban ese inexistente cáncer, pero lo siento muchísimo más por aquellos que de buena fé sintieron el dolor al creer esa asquerosa mentira. Un recuerdo muy especial a Fr. ++Fidel Rey de Castro y a la Soror ++Mari Su Sarlat que, todo corazón ellos, escribieron, llamaron y se preocuparon de hablar con unos, con otros, con el +Maestre Nicolau, con el +Hermano Miguel Fox, etc. preocupados de verdad por mi salud. Mi eterno agradecimiento a ellos dos y a todos los que se preocuparon de conocer mi estado de salud y que sufrieron al decirles que tenía un cancer. Quedaos tranquilos que no hay nada de eso, queridos +Hermanos.
Quizás la culpa también es mía la no heber escrito en el blog en tanto tiempo, pero tenía que reflexionar. Uno se cansa después de escribir a diario desde el 16 de enero del 2008, con más de tres mil artículos subidos y casi 500.000 visitantes en estos cuatro años, de avisar de tanto sinvergüenza, de tanto noble falso, de tanto Templario de Facebook y pacotilla. Uno se cansa de estafadores, de manipulaciones y de abusos cometidos contra ancianos que ostentan el más alto grado en la Orden y del que se aprovechan entre otros ese payaso emigrante aargentino que reside en México con la complicidad de los que rodean al Gran Maestre al mirar para otro lado mientras esos despreciables y cobardes falsos templarios se permiten el lujo de mofarse de antiguos Visitadores Magistrales en América que lo único que hicieron fueron levantar lo que ellos después han tirado.
Uno se cansa de desmontar montajes, desvelar intentos de estafas, de desenmascarar a esos bellacos que utilizando un Manto Blanco, sagrado para nosotros, y que no se merecen engañan a todo el que cae en sus manos. Me canso de títulos d enobleza dados por falsas casas reales, de imbéciles que utilizan falsas medallas militares, intentando engañar hasta a los jueces, (tendrán que demostrarlo), de embaucadores que utilizan a los +Hermanos y +Hermanas para ganar dinero a su costa lucrándose del nombre de la Orden del Temple.
Uno se cansa, y se retira a meditar, y en más de cuatro años deja descansar el blog, (fallo mío), pues estos sinvergüenzas no descansan, y al final uno llega a la conclusión de que no se puede parar, que los que sentimos al Temple, los que vivimos la Orden, tenemos que continuar luchando contra esos piratas del siglo XXI, esos traidores a lo que más queremos, de tal manera que el blog estará de nuevo cada día, pues, desafortunadamente para ellos, +Anselmo de Crespi no tiene ningún cancer, y si quisier Dios que alguna vez lo tuviera, Fratertempli continuaría adelante, pues relevo hay de sobra.
Gracias Fidel, Mari Su, Jose Miguel, y el resto de +Hermanos que os visteis engañados por esa gentuza y que sufristeis mi supuesta enfermedad como si fuera vuestra. A los difusores de tamaña acción, cuidado, no es bueno escupir al cielo, siempre cae encima.
FTAT, NND, +Anselmo de Crespi