Cerca de 800 mujeres musulmanas en Malasia crearon el “Club de las esposas obedientes”, que tiene por objetivo enseñar a las mujeres a ser sumisas y mantener a sus hombres felices en el dormitorio, con la premisa de que eso podría reducir el divorcio y la prostitución.
Según señala Ummu Atirah, una joven de 22 años de edad recientemente casada, en el Islam se les obliga a ser obedientes con sus maridos. Donde, digan lo que digan, tienen que seguirlos, considerándose un pecado el no obedecerlo y no hacerlo feliz.
Para lograr esto, Atirah agregó que además de obedecer a su esposo, la mujer en el mundo musulmán debe llevar un matrimonio feliz y para eso, el secreto está en mantenerlo satisfecho sexualmente.
Pese a que el club tiene antecedentes islámicos más bien conservadores, la fundadora del grupo Rojaya Mohamad, se refirió abiertamente acerca de las virtudes del sexo matrimonial aludiendo a que no hay nada de malo en convertirse en prostituta de su propio marido, ya que una buena esposa es aquella que es una buena sexoservidora de su esposo.
El “Club de esposas obedientes”, fue fundado por un grupo islámico marginal conocido como Ikhwan Global, que ha recibido diversas críticas por parte de políticos y activistas malayos, que hasta ahora lo han acusado de retroceder a la época medieval y de insultar a la mujer moderna de Malasia.
En tanto, las actividades del grupo, que anteriormente incluyó la creación de un club de defensa de la poligamia, muestran que las ideas islámicas conservadoras aún prosperan en Malasia.
Incluso existe una constante preocupación porque que los grupos radicales puedan recabar apoyo de otros musulmanes, que representan el 60 por ciento de la población de Malasia, de 28 millones de personas.
Según comentó la ministra musulmana a cargo de la política familiar, Shahrizat Abdul Jalil, “desafortunadamente, incluso hoy, todavía hay muchas mujeres musulmanas que ignoran sus derechos o son culturalmente inhibidas para ejercer sus derechos plenamente”.
@Menos del título, Cecilia Ortiz/radiosantiago.cl