El Pistis Sophia, perteneciente a la colección de un anticuario (Anthony Askew quien lo compró en una librería de Londres en 1773) en el que aparece María Magdalena, fue vendido en 178'5 al Museo Británico.
El manuscrito copto se encuentra hoy día en la British Library.
Original griego quizás hacia330, después copto hacia 340z escrito por un griego de Egipto. Es el primero de los escritos originales conocido, el mas voluminoso y también el menos conocido (F. Culdaut)
Si bien una identificación categórica de esta María es imposible no existe la menor duda de que este personaje es la mismísima María Magdalena. En algunos textos se la menciona explícitamente por su nombre: en el
Evangelio de Felipe, Jesús la llama «María Magdalena», y en la Pistis Sophia, «María la Magdalena». (pág 57
En Pistis Sophia, ella es «la heredera de la luz» v, en calidad de reveladora de las palabras de la Pistis Sophia, queda absofbida en, o se convierte en un aspecto de, la Sophia o Sabiduría de Dios. En calidad de discípula principal, primera testigo y heraldo de la Nueva Vida, y por ello reveladora del conocimiento salvífico en el Nuevo Testamento, su Dapel guarda gran semejanza con el de «la interlocutora principal» de la Pistis Sophia. (Pág 58)
En Pistis Sophia, uno de . los primeros tratados hallados antes que los escritos de Nag Hammadl, surge una discusión similar entre María y Pedro, el cual se queja en nombre de los otros discípulos de que Mana domine la conversacion acerca de la caída de Pistis Sophia del reino de la luz y de que, de este modo, les quite la palabra. Jesús lo reprende. Más tarde, María le dice a Jesús que teme a Pedro, «Porque me quiere amenazar y odia a nuestro sexo». (Jesús le dice que quienquiera que esté inspirado ppr el espíritu divino puede salir a hablar, Implicando con ello que la inspiración anula la distinción sexual y reiterando el tema de la androginia que se halla en el Evangelio de Felipe.) (pág 62)
Se ha sugerido que la hostilidad de Pedro hacia María Magdalena puede ser un reflejo de la ambivalencia histórica de los dirigentes de la comunidad ortodoxa hacia la participación de las muieres en la Iglesia. Pero ya a finales del siglo II, los principios de igualdad definidos en el Nuevo Testamento -a los que se adhería, sin lugar a dudas, san Pablo habían sido descartados a tavor de un retorno al patriarcado, propio del judaísmo, que los había precedido. (pág 62)
A pesar de la importancia que algunos textos gnósticos le otorgan a María Magdalena y a algunas de las otras mujeres, cuentan cono pocos indicios de lo que el siglo XX podría considerar una actitud femenina. De hecho, el mismo personaje de Pistis-Sophia aparece como otra Eva que, al separarse de su esposo divino, por presunción, transgrede la voluntad divina y acarrea así la creación de la materia y el mal, el caos y la destrucción de la raza humana (pag. 62)
De los escritos gnósticos que hablan de María Magdalena, el más largo y elaboradamente desarrollado es la Pistis Sophia, conocida en su versión copta que data de la segunda mitad del siglo IV, realizada a partir de un original todavía más antiguo que seguramente estaba escrito en griego. Este escrito narra la historia, dividida en cuatro documentos, del Resucitado, que pasa doce años más en compañía de sus discípulos para continuar instruyéndolos antes de su Ascensión final. Una vez más, la Pistis Sophia (o Fe-Sabiduría) adquiere forma de diálogo que, en este caso, sostienen los discípulos con algunas santas mujeres, entre las que se encuentran Salomé, Marta, María «la madre de Jesús» y María Magdalena, la cual torna a comparecer como la interrogadora principal. Ella es la «bienaventurada de bellas palabras», «Mariam, pura y espiritual» y «heredera de la luz», un personaje que, si bien no es exactamente un símbolo de la Sabiduría divina, al buscar y transmitir conocimiento sobre Pistis Sophia, se convierte en doncella y a veces hasta en alter ego del símbolo de la mismísima Sabiduría divina.
Si bien no resulta dificil entender por qué la jerarquía ortodoxa pudo haber querido descartar esta imagen de una mediadora poderosa, resulta más dificil descubrir por qué la crearon los gnósticos, preguntándonos si no derivó acaso de una tradición que ya no nos pertenece. A diferencia de otros cultos antiguos del mundo, tales como los de Egipto, Babilonia, Grecia, Roma, Africa, India y Norteamérica, la tradición cristiana, como sus equivalentes judía e islámica, sobresale por la ausencia de una divinidad femenina. (pág 64)
Pistis Sophia, el mito principal del sistema valentiniano, narra la caída, el arrepentimiento y la restauración de Sophia como el primer principio femenino que emana del Ser Supremo o Dios. Como el relato de Eva, es una narración sobre el excesivo orgullo femenino, que hace estragos y acarrea desastres. Habiendo abandonado a su consorte o suzugos, Pistis Sophia sigue una luz creyendo que ésta la conducirá del reino de la luz al lugar más elevado de todos, la Casa del Tesoro, donde espera encontrar grandeza. Como castigo por su arrogancia, los poderes materiales se abalanzan sobre ella privándola de su propia luz, de modo que cae en la oscuridad de los eones inferiores, al mundo de la materia o Caos, incapaz de volver a su puesto en el decimotercer eón hasta que se arrepiente y la redime el Salvador. El relato del castigo y arrepentimiento de Pistis Sophia era una advertencia a todos aquellos que transgredían, e ilustraba la necesidad del arrepentimiento y de la redención, el bautismo y el perdón, para un mundo que, a causa de su propia propensión al mal, se había separado de su Creador. (pág 69)
En la Pistis Sophia, Jesús ha viajado a través del cosmos... siendo su misión la de iluminar al universo y desterrar aquellos poderes maléficos del destino, la magia y la astrología... Y les dice a sus discípulos: " Miré hacia abajo al Mundo de la humanidad y encontré a María, a la que quieren llamar mi madre según el cuerpo de la materia... y yo. le envié el primer poder... el cuerpo que llevo en lo Alto"
El modo algo desechable en que Jesús describe a su "madre" en este pasaje aporta un Intrigante contraste con la prominencia y diversas expresiones tavorables de las que disfruta María Magdalena a lo largo del texto
María Magdalena o Mariam, como aparece en la Pistis Sophia, comienza a hablar después de haber estado mirando "al aire durante una hora". Su papel es cuestionar, elucidar y elaborar las palabras de Jesús mientras narra la caída y la redención de PistisSophia. Cuando ella le pregunta si puede hablar "con audacia", la respuesta de Jesús la distingue inmediatamente del resto de los discípulos: "Mariam, Mariam, la bienaventurada a la que voy a completar revelándole todos los misterios de las cosas de lo Alto. Habla con audacia, porque tú eres aquella cuyo corazón se esfuerza, más que todos tus hermanos, hacia el Reino de los cielos".
Por sus conocimientos e intuición , se convertirá en la "más bienaventurada de todas las mujeres de la tierra, porque tú eres aquella que se convertirá en el Pleroma de los Pleromas", y la alaba aún más por "iluminar todas las cosas con precisión y exactitud".
Así, ella recibe gnosis de él y se la infunde a los otros discípulos. Ella es la primera en interrogarlo sobre la naturaleza de la Pistis-Sophia, la cual, junto con su esposo o "compañero", es una de las veinticuatro emanaciones o principios que fluyen del Ser Supremo y que, a causa de su desobediencia, se ve privada de su propia luz en las tinieblas del caos, por debajo de los eones.
En vistas de que es Mariam quien predomina en los dos primeros de los cuatro documentos de Pistis Sophia, y de que pregunta treinta y nueve de las cuarenta y seis preguntas, no es de sorprender que moleste a los discípulos hombres y provoque el berrinche de Pedro: "Señor mío, no podemos soportar que esta mujer hable en nuestro lugar; y no deja que ninguno de nosotros hable, pero ella habla muchas veces".
Jesús dice que todo aquel que esté inspirado no debe dejar de hablar y, acto seguido, le pide a Pedro que interprete el segundo himno.
El primer documento de Pistis Sophia acaba... con Jesús aprobando la descripción de Mariam del encuentro de los poderes, la Piedad y la Verdad, y su relato de cómo "la justicia y la paz se besaron mutuamente... Jesús sigue celebrando a Mariam diciendo que "heredará todo el reino de la luz" y llamándola "heredera de la luz".
En el segundo documento (narración del rescate de Pistis Sophia), Mariam/María Magdalena es la interlocutora principal del relato... Es entonces cuando "María la Magdalena", como Jesús llama ahora a Mariam, le dice a éste que "comprende cada palabra que dice él", y Jesús "se asombra en gran medida" de sus palabras porque "se ha convertido en un espíritu muy puro", con lo cual Jesús la alaba diciendo: "Muy bien, oh pura y espiritual María, esa es la explicación de la Palabra". Y es así como, mediante una serie de preguntas y respuesta, serán revelados los misterios del universo gnóstico... Cuando llegue el milenio, los doce apóstoles se encontrarán junto a Jesús como reyes copartícipes reinando sobre aquellos que reciben los misterios del Inefable...
Curiosamente, en el lugar más elevado, entre sus "doce diáconos", Jesús les dice que "María la Magdalena, junto con Iohannes y la Virgen, superarán a todos sus discípulos", vinculando así, por primera vez desde el relato del evangelio de Juan, a las dos que, según la leyenda del medievo, se desposarían con él en calidad de discípulas preferidas.
El diálogo entre Jesús, María Magdalena y los discípulos continúa en los documentos tercero y cuarto..
Que Jesús celebre a María Magdalena como "heredera de la luz" parece completar su descripción como aquella que "se esfuerza hacia el cielo más que todos sus hermanos", y ello, combinado con la afirmación de que se convertirá en el "Pleroma de los Pleromas" estrecha el vínculo que ya tiene con el símbolo de la Sabiduría divina.
Susan Haskins
María Magdalena. Mito y metáfora
Pág 64-72